El Ibex-35, que volvió a ser el más castigado de los principales índices del Viejo Continente, se dejó un 1,06% y cerró en 13.726,30 puntos. Con este nuevo descenso, el Ibex-35, que es actualmente el peor de los índices europeos, pierde casi 3% en lo que va de año y tiene en rentabilidad negativa a 22 de los 35 valores que lo forman.
Las Bolsas siguen sin levantar cabeza a pesar de que lo intentan y ayer volvieron a ceder posiciones aunque en algunos momentos llegaron a estar en positivo. La pérdida de casi un 2% de Wall Street el pasado viernes, arrastrada por los malos datos del paro en Estados Unidos, condicionó la apertura ayer de las Bolsas europeas, que trataron de trataron de sobreponerse pero terminaron con recortes cercanos al 1%.
