La esperanza de vida al nacer, que en Andalucía alcanza los 76,4 años para los hombres y los 82,5 años para las mujeres en 2006, ha aumentado respecto al año anterior. Este crecimiento es generalizado en todas las provincias andaluzas, alcanzándose el mayor valor en Córdoba y Jaén, ambas con 77 años para los hombres y 83,5 años para las mujeres de Córdoba y 83,3 para las de Jaén.

Estas mejoras en la longevidad son más apreciables si se considera el indicador de esperanza de vida a los 65 años, que en el caso de los hombres se sitúa en 16,7 años y en 20,3 años en el caso de las mujeres, lo que supone un aumento de 3,5 años en las últimas dos décadas para hombres y de cuatro en las mujeres.

Estos datos han sido aportados por el Instituto de Estadística de Andalucía, organismo dependiente de la Consejería de Economía y Hacienda, que ha actualizado el Sistema de Información Demográfica con los últimos datos disponibles de las Estadísticas del Movimiento Natural de la Población de Andalucía (nacimientos, matrimonios y defunciones) correspondientes a 2006. Asimismo, se ha revisado su contenido, se ha incorporado nueva información y se ha modificado su estructura.

Los últimos datos indican que el número medio de hijos por mujer mantiene el crecimiento iniciado en los últimos años, situándose en 1,51 hijos por mujer en 2006, cifra que no se alcanzaba desde 1993. Son las provincias de Almería (1,64), Sevilla (1,55) y Cádiz (1,52) las que presentan niveles más altos, mientras que Huelva, con 1,44 hijos por mujer, presenta el menor valor.

También se mantiene el aumento del número de nacimientos de madres no casadas, que en 2006 suponían ya el 27,3% del total. Málaga (33,9%), Almería (32%) y Cádiz (30,5%) son las provincias con mayor porcentaje de estos nacimientos, mientras que Córdoba y Jaén presentan los niveles más bajos, un 18,5% y 17%, respectivamente.

También se observa, una vez más, un aumento de la edad a la que se casan los andaluces solteros: 30,5 años para los hombres y 28,6 para las mujeres, al mismo tiempo que disminuye el número de primeros matrimonios entre los solteros andaluces, tanto para los hombres como para las mujeres. Sin embargo, como se puede observar a través del indicador conyuntural de primonupcionalidad (número de primeros matrimonios por cada 100 hombres/mujeres), el descenso es menor para mujeres que para hombres.

La inmigración a Andalucía se puede medir a través del índice de atracción (número de inmigrantes por cada 1.000 residentes). Este índice muestra un crecimiento sostenido en los últimos años, con predominio de las entradas desde el extranjero a partir del año 2004.