Apostar por el talento y la tecnología

Vivimos en un mundo que experimenta, en estos momentos, una disrupción exponencial de cambios, nunca antes conocida en la historia de la humanidad, gracias a una variable no humana: la tecnología. Esta disrupción nos sitúa ante un contexto que los expertos han descrito hace tiempo como un entorno VUCA caracterizado por la volatilidad, la incertidumbre, la complejidad y la ambigüedad. Es cierto que estos parámetros definen con rigor la época actual que estamos viviendo y que, por su naturaleza, suponen un desafío decisivo para la gestión de un factor no tecnológico: las personas y su talento.

Industria 4.0, transformación digital y cuarta revolución industrial están abriendo las puertas a un nuevo modelo económico. De manera un tanto paradójica, y a diferencia de las anteriores, esta nueva etapa de la economía no es fruto de una transición industrial basada en una determinada fuente de energía, sino en el conocimiento tanto de la mente humana como, especialmente, de la Inteligencia Artificial. La coordinación de los datos se convierte, de este modo, en el nuevo oro de esta transformación digital que bien podemos vivir como meros espectadores pasivos o protagonizar en clave de oportunidad.

El objetivo, y debemos trabajar para ello, es construir y abrazar esta cuarta revolución industrial desde el optimismo, en un cambio de mentalidad, viviendo esta coyuntura desde una visión positiva, adaptándonos al desarrollo desde la anticipación. Solo así podemos aprovechar al máximo las ventajas que nos ofrece.

En el caso de España, es importante construir los pilares que den soporte a nuestro futuro, que tiene que ser un futuro prometedor, en el que nuestro país esté a la vanguardia. España no puede competir por una mano de obra barata, tiene que poner en valor sus ideas, su tecnología, su aportación de valor, su innovación y su flexibilidad. Para la consecución de este reto, hace falta una visión, un despliegue estratégico y ser muy consistentes.

Las cinco líneas de actuación claves y prioritarias que estamos trabajando desde la Comisión de Industria 4.0 de AMETIC son las siguientes: un modelo de gobernanza de la industria 4.0 centrado en la colaboración público-privada que genere conciencia y sensibilización sobre la envergadura e impacto del proyecto y la importancia de las infraestructuras necesarias para la digitalización; co-creación con el tejido industrial a fin de que la transformación digital alcance tanto a las grandes compañías como a la pequeña y mediana empresa; una estrategia clara de desarrollo, involucración y trabajo en ecosistema del conjunto de tecnologías habilitadoras de la industria 4.0 (Internet de las Cosas, Cloud Computing, fabricación aditiva, ciberseguridad, Big Data, robótica móvil, Inteligencia Artificial, Realidad Aumentada, etc.); el desarrollo del talento digital como clave fundamental del éxito en esta nueva época; y, por último pero no menos importante, el fortalecimiento de las relaciones internacionales y el aprendizaje de las mejores prácticas a nivel internacional en materia de digitalización.

Y es que la economía digital es la causa perfecta para que el viejo continente y, por lo tanto, España, recupere industrias y actividades económicas que habían abandonado sus orígenes, con una tecnología que permite un producto conectado y una relación con el consumidor que busca maximizar su satisfacción desarrollando productos y servicios personalizados y humanizados. El cliente tendrá un papel más activo hasta poder contribuir en el diseño y en la fabricación de los bienes que adquiere. Por lo que la industria debe proyectar todos sus esfuerzos en aumentar la velocidad de producción, la construcción de lotes más pequeños, el nivel de personalización del producto y, de este modo, mejorar la experiencia del cliente. Esto solo es posible con talento de alto nivel, produciendo lo más cerca posible de ese cliente para el que tenemos que personalizar un producto.

Sin embargo, para abrazar la oportunidad de esta nueva época, necesitamos preparar nuestra estrategia de talento 4.0. En primer lugar, identificar el mapa de talento 4.0 y los perfiles digitales que se van a necesitar a medio y largo plazo para desplegar con consistencia tu visión estratégica de transformación digital. Si este ejercicio se realiza desde una perspectiva sistémica, esto es, a la luz no solo de tus demandas y de la oferta de talento que hay actualmente en el mercado, sino de las necesidades a medio y largo plazo del ecosistema de la Industria 4.0 a nivel tanto local, como nacional e internacional, se tomará conciencia inmediatamente de la inmensa brecha de talento digital existente entre la oferta y la demanda, y de la enorme oportunidad y desafío que el desarrollo del talento supone en el actual contexto de esta nueva época.

Para sensibilizar y poner remedio de manera masiva a este déficit de talento digital, desde AMETIC hemos lanzado la ‘Alianza para el Desarrollo del Talento Digital’, una plataforma para crear un ecosistema nacional de fomento del talento 4.0 desde un modelo de innovación abierta y colaboración con todos los stakeholders. ¡Súmate a ella! Encontrarás un foro y grupos de trabajo que, sin duda, te aportarán valor añadido para preparar tu estrategia de talento 4.0: cómo identificar perfiles competenciales para la Industria 4.0 y certificar su formación; cómo preparar equipos de transformación digital que trabajen como ángeles del cambio con gran impacto en la cultura de tu organización; cómo atraer, desarrollar y enamorar al talento digital que necesitas para digitalizar toda tu organización; cómo fomentar una verdadera educación 4.0 que fomente vocaciones STEM, que cree sinergias de colaboración efectiva con las universidades y desarrolle programas de excelencia en el campo de la Formación Profesional Dual.

España debe competir por ser un referente en esta liga, la apuesta por el desarrollo de tecnología y el talento es clave para la evolución de nuestro país y para la atracción de nuevas inversiones. Cada año tenemos cifras récord de turistas visitando nuestro país, es un lugar excelente para vivir, tenemos una cultura, un patrimonio y una gastronomía de la que sentirnos tremendamente orgullosos, debemos aprovechar ese núcleo positivo, pensar en grande y liderar al máximo nivel, bajo un modelo de colaboración público-privada, una estrategia que maximice la oportunidad de esta era digital.

 

Verónica Pascual Boé

CEO de ASTI TechGroup

Presidenta de la Comisión de Industria 4.0 de AMETIC

Vicepresidenta de Desarrollo del Talento de AMETIC

 

Artículo incluido en el número de marzo de la revista Agenda de la Empresa