Iberdrola y la empresa Arbórea Intellbird han presentado en el parque eólico Sierra de Dueña, ubicado en Salamanca, su nuevo desarrollo tecnológico enfocado a mejorar los modelos de inspección de líneas eléctricas.

Al uso del Aracnocóptero, el dron que ha revolucionado la inspección de palas de aerogeneradores, se une el empleo del software “Power Grids” a líneas de evacuación de parques eólicos, que permite la digitalización de activos y facilita la inspección diferida de una forma más fiable, al mismo tiempo que proporciona la aplicación de los datos de sistemas de análisis basados en visión e inteligencia artificial, para detectar y medir problemas estructurales ocultos como la corrosión, puntos calientes u otras deficiencias en elementos críticos.

El nuevo modelo de Aracnocóptero, para volar mayores distancias sobre el tendido eléctrico, permite, junto con el nuevo software, diseñado también por la empresa salmantina, incrementar la eficiencia de las inspecciones de mantenimiento de instalaciones eólicas, reduciendo los tiempos de parada y consiguiendo un nivel de detalle muy superior al de los métodos de inspección tradicionales.

Los mapeos digitales que se obtienen del trazado de las líneas, de muy alta resolución, son procesados y puestos a disposición de Iberdrola Renovables mediante la misma aplicación software e informes en nube, facilitando la integración de la gestión automática e inteligente de defectos.

La aplicación móvil asociada Power-eye introduce realidad aumentada para que los reparadores encuentren los defectos identificados en las líneas, simplemente observando la línea con ayuda de un simple teléfono móvil.

La metodología de inspección innovadora basada en la digitalización de activos permite centralizar las decisiones estratégicas y generar un control eficiente con un enfoque en la intervención predictiva sobre los defectos. Estas primeras experiencias experimentales realizadas sobre líneas eléctricas de Iberdrola Renovables aportan datos valiosos para valorar la viabilidad de un nuevo modelo de inspección.

Un factor esencial para Iberdrola es la reducción de riesgos al evitar la necesidad de que el personal de inspección suba a los apoyos eléctricos. Además, el nuevo modelo de inspección digital busca incrementar la fiabilidad en el control de los activos.

Esta innovadora iniciativa se ha efectuado de forma experimental en el emblemático parque eólico Sierra de Dueña, a unos 40 kilómetros de Salamanca. Esta instalación dispone de una potencia de 31,5 megavatios (MW) y se ubica entre los términos municipales de Pedrosillo de los Aires, Frades de la Sierra, Las Veguillas y Membribe de la Sierra. Este complejo está compuesto por 37 aerogeneradores y dispone de una subestación desde la que se evacúa la electricidad.

Mejoras en el proceso de inspección de palas

La empresa salmantina, con la colaboración activa del área de Operación y Mantenimiento de Iberdrola Renovables, ha introducido también importantes mejoras en el proceso de inspección de palas. La integración de algoritmos relaciona los defectos de las palas con modos de fallo y curvas de envejecimiento, lo que facilita el diagnóstico para poder corregir los errores en un plazo más corto.

De esta forma, el software es idóneo para detectar graves problemas estructurales internos en fases tempranas, lo que ayuda a Iberdrola a diseñar y poner en práctica nuevos procedimientos de reparación en altura, más seguros y económicos, discriminando las palas en mal estado y reparándolas a menor coste.

Durante los dos últimos años, los jóvenes ingenieros de Arbórea han auditado ya en profundidad más de 1200 palas de Iberdrola en España y México. Los resultados han permitido destacar el valor del procedimiento combinando el Aracnocóptero y el software asociado.

Arbórea ha comenzado a instruir a técnicos de zona de Iberdrola Renovables en el manejo de la plataforma de software de análisis de palas “Web Blade” y también sobre la nueva plataforma de gestión de líneas “Power Grids” todo ello en el Campus Iberdrola ubicado en San Agustín de Guadalix.

Gracias a este proyecto, Iberdrola podría reducir considerablemente el tiempo empleado en la revisión de las máquinas instaladas en sus parques eólicos, mejorando además su fiabilidad, lo que supone un importante avance en las labores de operación y mantenimiento, uno de los objetivos prioritarios del sector eólico en la actualidad.