La pasión por la arqueología siempre ha estado presente en la vida de Fátima Castilla, una emprendedora andaluza que no dudó hace años en dedicarse de forma autónoma a la profesión que siempre llevó dentro. Desde el año 2000, esta joven cordobesa trabajó en el sector pero no fue hasta hace pocos años cuando decidió montar su propio negocio. Con el tiempo, "me di cuenta que era una profesión con futuro, sobretodo en Córdoba, hay mucha demanda ya que tiene un gran patrimonio bajo el subsuelo y decidí montar mi propia empresa". Así nació ArqueoQurtuba, una empresa que ofrece una gestión integral del patrimonio arqueológico realizando cualquier tipo de actividad: excavaciones, prospecciones, seguimientos, estudios de impacto medioambiental, restauración, análisis paramentales y promoción y difusión de nuestro patrimonio. Así nació ArqueoQurtuba. Todo este trabajo "lo ofertamos con la máxima brevedad, con buena relación calidad-precio, rapidez en los presupuestos, calidad en nuestros informes y respeto por las fechas acordadas. El secreto de nuestra empresa esta en ser resolutivos, lo que hay que conjugar con el trabajo bien hecho", apunta. Con el nuevo PGOU (Plan General de Ordenación Urbana) en el año 2000 Córdoba triplicó la realización de excavaciones arqueológicas, además de las cautelas de protección del patrimonio en el resto de la provincia y de Andalucía, así que hacia el año 2004 "yo tenía muy claro que una empresa de arqueología sería un reto muy interesante, además para entonces contaba con un buen equipo de profesionales a mi alrededor y una clientela más o menos estable". Poco a poco fueron andando más camino. "Al principio solo realizábamos excavaciones de urgencia (hoy llamadas actividades arqueológicas preventivas tipo sondeo), controles de movimiento de tierras y prospecciones, sin embargo, a día de hoy, realizamos restauración de edificios históricos, puestas en valor de restos arqueológicos así como estudios paramentales (de paredes) de edificios protegidos y próximamente desarrollaremos actividades relacionadas con el turismo y la difusión del patrimonio", señala Fátima Castillo. Actualmente, ArqueoQurtuba la forman un equipo multidisciplinar: 15 arqueólogos, una secretaria, restauradores y un equipo de topografía y dibujo. El cliente de esta empresa cordobesa "puede ser cualquier persona física, promotora-constructora u organismo público que tenga que realizar una excavación arqueológica, prospección, estudio histórico-arqueológico, puesta en valor o restauración". Asimismo, destaca que tienen un convenio de colaboración con la Universidad de Córdoba que "consideramos es muy interesante en la formación de futuros arqueólogos, ya que hacen prácticas con nuestra empresa y, al mismo tiempo que nos ayudan, adquieren una formación práctica en campo muy importante antes de entrar en el mundo laboral. Aparte realizamos dentro de la misma colaboración, conferencias, cursos y seminarios que animan y estimula a los alumnos". En cuanto a la situación que vive el sector, la directora de ArqueoQurtuba reconoce que "Andalucía es, por suerte, una de las comunidades españolas con más patrimonio, ello unido a la construcción y rehabilitación de edificios es lo que genera nuestro trabajo. El mercado está mucho más parado que hace un año pero como ya sabemos, hoy por hoy, la crisis está generalizada en todos los sectores. Evidentemente la crisis afecta a todos los sectores y el nuestro es uno de ellos, hay menos obras y por tanto menos suelo para intervenir, así como menos rehabilitaciones o construcción en general. Todos en una situación así hacemos mejores ofertas pero estoy segura de que pronto saldremos de esto y deberemos aprender de ello". Y añade: "Lo que pienso que hace falta es informar a los andaluces y españoles de lo importante que es nuestro patrimonio y de la suerte de tenerlo en nuestra tierra. También pienso que podía haber más ayuda pública para este tipo de actividad, pues actualmente todo recae sobre la persona o empresa que quiere realizar una construcción. Debería de haber más difusión de nuestro patrimonio para reconocer lo significativo que es y las posibilidades de trabajo que podría proporcionar si todos nos implicáramos un poco. Creo que se le podría sacar más fruto a nuestra cultura milenaria y a nuestro patrimonio histórico, pero para ello hay que empezar por entenderlo, proteger lo necesario y que la administración ayude", subraya Fátima Castillo.

José Santos

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