Especial 40 aniversario de la CEA –

José Luis García-Palacios Álvarez, presidente de Caja Rural del Sur –

Revista febrero Agenda de la Empresa

Es una evidencia que 40 años después del nacimiento de la CEA todo ha cambiado, indudablemente para mejor, muestra inequívoca del resultado de la unión de muchas voluntades y, podemos afirmar, sin temor a equivocarnos, que en éstas prevaleció el interés general y que el saldo final ha sido tremendamente positivo. La sociedad española, por ende la andaluza, ha superado una enorme prueba en estos 40 años, aunque nos quedará aun tiempo para conocer la calificación definitiva a este ejercicio dadas las circunstancias que de forma recurrente se dan en nuestra comunidad y país, en base a políticas particulares en detrimento de los intereses generales de los españoles y andaluces. Pero, a pesar de ello, debemos esbozar una sonrisa si miramos atrás y observamos la evolución de estas últimas cuatro décadas, progresamos adecuadamente…, de forma general.

La CEA es fruto de una voluntad conjunta y superior a la individual, siempre dentro de la composición social organizada. Es fruto de la implementación de un espacio donde prima en forma sobresaliente el desarrollo social, en la más amplia definición de sus posibles acepciones. A través de sus territoriales se diseñó una red de servicios más allá de la mera atención a las necesidades de asesoramiento o necesidades de las empresas.

En la CEA, donde se conjugan todas las organizaciones, se defiende la posición, se destaca la vital importancia de la empresa y de todos quienes las componemos. Se blinda la libertad y se resguarda la íntima y particular capacidad de las personas para luchar, trabajar y esforzarse en mejorar nuestra sociedad desde la actividad empresarial y autónoma. En definitiva, la mejora continua para todos, la más justa de las actuaciones que puede llevar a cabo el ser humano por quienes le rodean, por su entorno y por las próximas generaciones.

Hoy podemos afirmar rotundamente que la CEA vive uno de sus momentos más relevantes. No significa esto que afirmemos que cualquier tiempo pasado quedó años luz del actual, ni mucho menos. Nada de ahora hubiera sido posible sin los precedentes, sin los visionarios y esforzados trabajos realizados por todos quienes han participado en la construcción de esta organización. Hoy nadie hubiera sido capaz sin las lecciones y aprendizaje recibido. El momento de hoy en la CEA es un tiempo de “resurrección”, de reafirmación conceptual y de convencimiento del servicio que se presta y brinda a toda la sociedad, directa e indirectamente.

Después del profundo daño sufrido por todos en los tiempos recientes, solo cabía una posibilidad; salir adelante, restituir la confianza y alentar al resto con tu propio ejemplo, que no ha sido otro que trabajar, trabajar con humildad y con mucha generosidad. A buen seguro A. Einstein se acordaría hoy de la CEA si acuñará su célebre cita de “Dar ejemplo no es la mejor manera de influir en los demás, es la única”. Sigamos en este modo de mejora continua otros 40 años más, al menos.

¡Muchas felicidades!

 

José Luis García-Palacios Álvarez

Presidente de Caja Rural del Sur