La transformación digital está ayudando a las ciudades a convertirse en espacios inteligentes, un fenómeno acelerado en España gracias a los programas lanzados por los ministerios de Hacienda, Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado-EDUSI, y de Industria, Plan Nacional de Territorios Inteligentes-PNTI.

El Objetivo de Desarrollo Sostenible nº 11 (ODS 11) se centra en la sostenibilidad de las comunidades y ciudades, que es el espacio donde tienen lugar actividades como el comercio, la cultura, la ciencia o el desarrollo social, entre otras. El crecimiento urbano sin precedentes de los últimos años requiere mejorar la planificación y la gestión urbanas para que los espacios urbanos sean más inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles.

La normalización a cargo del comité técnico de AENOR AEN/CTN 178, centrado en las Ciudades Inteligentes, está produciendo múltiples beneficios para nuestras ciudades, las empresas del sector de las tecnologías y, en definitiva, para la ciudadanía, objetivo final de este esfuerzo.

Dentro de los procesos de normalización del CTN 178, Segittur creó el Subcomité 5 para los Destinos Inteligentes, que con las normas 501 y 502 están sentando las bases para mejorar la experiencia del turista a la vez que incrementa la sostenibilidad en sus tres vertientes: ambiental, social y económica. Otros aspectos relevantes de mejora son la accesibilidad y la calidad de vida de los residentes.

Programas y Normas para las metas del ODS 11

A continuación, repasamos todas las metas del ODS 11 a la luz de los programas y normas españolas de Ciudades Inteligentes, con especial atención a los de Destinos Inteligentes.

  • La Meta 11.1 está diseñada para garantizar el acceso de todas las personas a viviendas y servicios básicos adecuados, seguros y asequibles y mejorar los barrios marginales, que es objeto del Objetivo Temático 9 de la EDUSI, centrado en la inclusión social y la lucha contra la pobreza.
  • La Meta 11.2 se destina al acceso a sistemas de transporte seguros, asequibles, accesibles y sostenibles para todos y mejorar la seguridad vial, en particular mediante la ampliación del transporte público, prestando especial atención a las necesidades de las personas en situación de vulnerabilidad, las mujeres, los niños, las personas con discapacidad y las personas de edad.
  • La Meta 11.3 intenta aumentar la urbanización inclusiva y sostenible y la capacidad para la planificación y la gestión participativas, integradas y sostenibles de los asentamientos humanos en todos los países.
  • La Meta 11.4 nos impulsa a proteger el patrimonio cultural y natural del mundo, que es y ha sido objeto del Plan Nacional de Ciudades Inteligentes, que contempla proyectos específicos como es el caso de Segovia. El uso de tecnologías como la Realidad Virtual o la Analítica de Datos proveniente de sensores aplicados a los edificios, proporciona un mayor control sobre el mantenimiento de nuestro rico patrimonio. En el segundo caso, los esfuerzos en modelar los recursos naturales como un bien a proteger y a explotar de manera sostenible, se encuentran recogidos en el estudio llevado a cabo por la Generalitat Valenciana para ofrecer un espectro de las diferentes tecnologías que pueden ser usadas en los proyectos de DTI. En este sentido, las normas UNE especializadas en turismo juegan un papel fundamental para su implantación y desarrollo masivo.
  • La Meta 11.5 anima a reducir el número de muertes por desastres, como los causados por el agua, y reducir las pérdidas económicas protegiendo a las personas más vulnerables. De nuevo, la tecnología nos ofrece soluciones como sistemas de alerta temprana ante desastres que permiten que la población se mantenga informada de las amenazas. Casos como las redes de sensores en boyas, como las que tiene el servicio de alerta contra tsunamis en el Pacífico, o los centros de lucha contra los huracanes, un fenómeno que en los últimos tiempos se acerca a la costa de la Península Ibérica.
  • La Meta 11.6 se preocupa por reducir el impacto ambiental negativo de las ciudades, especialmente en lo que se refiere a la calidad del aire y los residuos. Mucho se ha avanzado en la sensórica, tanto fija como móvil, para la monitorización de parámetros de contaminación atmosférica, como es el caso de Urban Clouds en la ciudad de Málaga. También los nuevos modelos de negocio PPP para fomentar la optimización de la recogida de basura y la mayor eficiencia de estos servicios están contribuyendo a la disminución de los gases de efecto invernadero, como es el caso de LIPASAM en Sevilla con la tecnología de Wellness Telecom.
  • La Meta 11.7 quiere dar acceso universal a zonas verdes y espacios públicos seguros, inclusivos y accesibles, en particular para las mujeres y los niños, las personas de edad avanzada y las personas con discapacidad. Para lograrlo, la tecnología Edge Computing aplicada a sensórica compleja, como es el caso de las cámaras digitales, están aportando con su carácter disuasorio, una herramienta inestimable para potenciar la seguridad de los espacios públicos en especial en los momentos de eventos singulares. La normativa en materia de seguridad está presente en todo el corpus de la 178 para garantizar la inviolabilidad de los sensores complejos, que no dejan de ser computadores conectados a redes de comunicaciones susceptibles de ser hackeados.
  • La Meta 11.a del ODS 11 fomenta los vínculos económicos, sociales y ambientales positivos entre las zonas urbanas, periurbanas y rurales, fortaleciendo la planificación del desarrollo nacional y regional. El PNTI contempla una partida de 60 millones de euros para el desarrollo de la Smart Rural, es decir, el desarrollo de las TIC en los territorios que están fuera de los grandes núcleos urbanos. Los DTI de Espacios Naturales Inteligentes han sido objetivo de Invattur, que se encuentra al frente de la ola de esta actividad a nivel mundial.
  • La Meta 11.b alienta las políticas y planes integrados para promover la inclusión, el uso eficiente de los recursos, la mitigación del cambio climático y la adaptación a él; objetivos que están alineados con la EDUSI en varios de sus objetivos temáticos como son el OT4 y el OT6, que son consecuencia de los acuerdos adoptados por la Unión Europea en materia de lucha contra el cambio climático. La resiliencia ante los desastres es otro de los aspectos que incluye esta meta y en la que proyectos como Antares, en el Cabildo de la Isla de La Palma, son ejemplos de sistemas de alerta temprana y herramientas para combatir los desastres naturales. Es el caso de los sistemas de monitorización de cuencas hidrográficas, como el que dispone la Confederación del Guadalquivir, que permite coordinar las operaciones de lucha contra el desbordamiento del río.
  • La Meta 11.c aboga por dar apoyo a los países menos adelantados, para que construir edificios sostenibles y resilientes utilizando materiales locales. En este sentido, los nodos IoT del PNTI de Red.es apuntan a esta meta directamente. En Andalucía, tanto Sevilla como Málaga han recibido 5 millones para realizar pilotos en más de 400 edificios. Estos pilotos tienen como objetivo desarrollar una norma IEC de la construcción para extenderlo a todos los nuevos edificios que se construyan en nuestro país.

Conclusiones

La alineación que existe en España entre los Programas y la Normalización UNE para las Ciudades Inteligentes son un arma sin igual para el cumplimiento del ODS 11. La consideración de las metas en nuestra actividad diaria nos conduce a un desarrollo económico mucho más sostenible y rentable. Las empresas son los auténticos motores para el cumplimiento de los ODS y, muy en especial, las empresas de tecnología, para las metas del ODS 11.

 

Adolfo Borrero Villalón

Adolfo Borrero Villalón

CEO de Aalto Consultores

Presidente de la Comisión de Smart Cities de Ametic y CEOE

 

Artículo incluido en el reportaje Cómo apoyan las Normas a los ODS del número de abril de la revista Agenda de la Empresa