El consejero de Innovación, Ciencia y Empresa, Francisco Vallejo; el todavía presidente de EADS-CASA, Francisco Fernández Sainz; y el secretario general de Universidades, Investigación y Tecnología de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa, José Domínguez Abascal, quien preside la Fundación Andaluza para el Desarrollo Aeroespacial, han firmado un convenio para el desarrollo del Centro de Excelencia de Simuladores de Vuelo y Entrenamiento de Tripulaciones de Vuelo y Mecánicos de Mantenimiento de EADS-CASA, que se instalará en las inmediaciones de la planta de montaje final del A-400M junto al aeropuerto de Sevilla y que estará a pleno rendimiento el próximo 2009.

Estas instalaciones tecnológicamente muy avanzadas, para las que se prevé inversión total de 82 millones de euros, permitirán la investigación y la innovación en el campo del entrenamiento tanto de los pilotos, como de los mecánicos de los aviones que produce dicha industria.

En concreto, el Centro pretende servir de 'plataforma real' para el desarrollo de un sistema integral de entrenamiento de tripulaciones de aviones que dé servicio a la demanda que puede generar el desarrollo alcanzado por las industrias del sector aeronáutico en Andalucía.

Según la memoria descriptiva del centro, el proyecto ampliará las capacidades actuales del Centro de EDAS-CASA que ya existe en Sevilla, dotándolo de los dispositivos de entrenamiento que hay que desarrollar específicamente. De esta forma, la ampliación de estas capacidades introducirá, por ejemplo, un área de innovación tecnológica. Se pretende utilizar este proyecto para crear una infraestructura que permita mantener el liderazgo en este campo, dotada de una unidad de I+D de la enseñanza, que abra las puertas a la colaboración con la Universidad y empresas proveedoras de productos para la formación de pilotos y mecánicos de aviones.

También se desarrollará unos simuladores y otros dispositivos de entrenamiento específicos para tareas de gran complejidad en las que no bastaría un entrenamiento teórico o basado en cursos interactivos por ordenador, sino que necesitan un entorno más realista, pero que son inabordables en caso de tener que utilizar un avión real.

De esta forma, para alojar los equipos e instalaciones destinadas a proporcionar estos servicios se construirá un edificio de tres plantas en las que se diferenciarán una zona de docencia, un departamento de I+D, una sala de realidad virtual, un área de gestión, unas instalaciones auxiliares y de mantenimiento, además de una zona de descanso.

Los efectos esperados de la puesta en funcionamiento de este centro se dividen en directos e indirectos. Uno directo, relacionado con la actividad propia del centro, es decir, con el entrenamiento de pilotos y tripulaciones de aviones; y otro indirecto, relacionado con la puesta a punto de los medios que el centro utiliza para la consecución de sus fines, es decir, con el desarrollo, actualización y mejora tanto de los equipos como de las técnicas de enseñanza.

También resulta relevante la participación de las universidades en el proyecto en lo que se refiere, por una parte, al impulso de la investigación y el desarrollo tecnológico con "especial incidencia" en la generación de patentes y la creación de empresas de base tecnológica en las áreas de ingeniería antes citadas y en otras áreas relacionadas con el desarrollo de software específico, el tratamiento de la imagen y el sonido, y la recreación virtual de escenarios de operaciones, entre otras.

Además, la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa está interesada en establecer un área de I+D del entrenamiento en este centro de excelencia a fin de preservar el liderazgo que se pretende obtener con este proyecto y garantizar que la innovación se mantendrá durante años, redundando en beneficio de todas las empresas y organismos que participen en este proyecto o aquellas que se asocien a dicha iniciativa con posterioridad.

En el proyecto intervendrán la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía (IDEA) que aportará a la Fundación Andaluza para el Desarrollo Aeroespacial, en concepto de préstamos, los fondos necesarios para la construcción y equipamiento del Centro; y la Fundación, que será la propietaria del centro y quien lo edificará y equipará.

Por su parte, EADS-CASA, que cederá a la Fundación los derechos de superficie del terreno donde se construirán las instalaciones, gestionará por encargo de la Fundación la construcción y el equipamiento, y adquirirá los derechos de uso del Centro durante los 30 años siguientes a su entrada en funcionamiento, actividad por la que abonará a la Fundación un total de 96 millones de euros.