El consorcio tecnológico SCHOTT, con sede en Maguncia, Alemania, va a construir una segunda fábrica de tubos receptores solares en España. En agosto pasado, SCHOTT dio el paso de la fabricación piloto a la fabricación industrial en serie de tubos receptores, con la entrada en servicio de una primera línea de producción en su sede de Mitterteich (Baviera). Con esta segunda fábrica de tubos receptores, ubicada en la provincia de Sevilla, a principios de 2008 SCHOTT habrá duplicado su capacidad productiva. La inversión se cifra en unos 22 millones de euros.

Los tubos receptores son un componente clave de las centrales térmicas solares de colectores cilindro-parabólicos, que convierten la energía solar en calor, aprovechando éste para la generación de energía.

“Las centrales térmicas de colectores cilindro-parabólicos ofrecen un potencial enorme para el abastecimiento energético del futuro. Con nuestro tubo receptor somos líderes tecnológicos mundiales. Nuestro objetivo es convertirnos también en líderes del mercado. Construimos esta segunda línea de producción en España, porque nuestros clientes europeos están radicados allí y el área mediterránea es un mercado muy prometedor para las centrales eléctricas termosolares”, comenta el Prof. Dr.-Ing. Udo Ungeheuer, Presidente del Consejo de Dirección de SCHOTT AG.

Francisco Vallejo Serrano, Consejero de Innovación, Ciencia y Empresa de la Junta de Andalucía, se ha congratulado por la decisión de SCHOTT: “se trata de una magnífica noticia, que va a convertir a Andalucía en un referente internacional en el aprovechamiento de un recurso energético limpio como es el sol, y va a permitir el desarrollo de una potente industria ligada al sector de las energías renovables, en las que la Comunidad Andaluza es ya una región líder en Europa”.

SCHOTT ha recibido pedidos, entre otros, para el suministro de tubos receptores a las centrales solares actualmente en construcción “Nevada Solar One”, en el estado de Nevada (EE.UU.), y “Andasol”, en Andalucía. El proyecto de Andalucía es la primera central eléctrica termosolar explotada comercialmente de Europa.

Las centrales térmicas de colectores cilindro-parabólicos tienen el potencial de producir, ya a medio plazo, energía eléctrica a precios competitivos en la regiones en torno al cinturón solar de la Tierra, dado que presentan el mejor rendimiento y los costes de producción de electricidad más bajos de entre todas las tecnologías solares. Esta tecnología ha venido demostrando su viabilidad para la producción centralizada de electricidad durante 20 años, que es el tiempo que nueve de estas centrales eléctricas, localizadas en el Desierto del Mojave (California), llevan produciendo electricidad de origen solar, con una potencia total de 354 MW, para abastecer a 200.000 hogares. SCHOTT ya suministró en el pasado tubos de vidrio especial de alta calidad, utilizados como tubo envolvente para los receptores de dichas centrales eléctricas. Finalmente SCHOTT desarrolló en 2004 un tubo receptor de alto rendimiento propio, de calidad claramente mejorada.

Las centrales térmicas de colectores cilindro-parabólicos constan de un gigantesco campo de espejos curvados en forma parabólica, que concentran la luz solar sobre los receptores (tubos absorbedores) posicionados a lo largo de la línea focal de los espejos. Dentro de los receptores, provistos de un recubrimiento especial, se convierte la radiación solar concentrada en calor, que es entregado a un aceite especial resistente a las altas temperaturas, que circula por su interior. A consecuencia de ello, el aceite se calienta hasta los 400 °C. A continuación es bombeado hasta el bloque central de la instalación, donde recorre varios intercambiadores de calor, generando allí – igual que en las centrales eléctricas convencionales – el vapor necesario para accionar unas turbinas para la generación de electricidad.

La concienciación acerca de que las centrales eléctricas termosolares son una de las opciones más importantes para la cobertura energética del mañana, aumenta continuamente en las esferas políticas. La conferencia internacional de energías renovables “renewables 2004”, celebrada en Bonn, incluyó en su programa de actuaciones la “Global Market Initiative” (GMI) para la implantación en el mercado de las centrales eléctricas termosolares. En septiembre de 2005 el Parlamento Europeo requirió a la Comisión Europea que promoviera la construcción de centrales eléctricas termosolares. En la conferencia World Energy Dialogue, celebrada durante la Feria de Hannover 2006, el Club de Roma ha insistido sobre la necesidad de construir centrales eléctricas termosolares en España y en el norte de África.