El sector representa el 21,13% de las empresas emisoras

El uso de la factura electrónica en el sector de la alimentación en España es cada año más relevante, según el Estudio sobre el uso de la Factura Electrónica en España 2017-2018, elaborado por SERES.

Según este informe, el sector alimentario representa el 21,13% de las empresas emisoras de facturas electrónicas españolas y el 12,69% de las receptoras, en una industria que alcanzó, en 2018, los 116.890 millones de euros de facturación y que supone el 3% del PIB nacional y representa el 16% del conjunto de la industria española.

Por volumen de facturas, esta participación representa el 28,98% del total de las facturas emitidas y el 15,26% de las recibidas, “que se justifica en que esta industria es de las más importantes de nuestro país y con un gran número de transacciones internacionales por lo que el uso de la e-factura es mucho más seguro y ágil”, explica Alberto Redondo, director de Marketing y Comunicación de SERES.

Total nacional

De acuerdo con el estudio, el número de facturas electrónicas procesadas en 2018 en España ascendió a 181.884.086 documentos, un 14,92% más que en 2017, según el Estudio SERES de Implantación de la Factura Electrónica en España 2017-2018. Del total, 147.953.331 documentos corresponden a transacciones entre empresas (B2B), 22.292.891 a operaciones entre empresas y las administraciones públicas (B2G) y 11.637.864 a ventas de empresas a particulares (B2C).

Según el informe, gracias al uso de la factura electrónica, las empresas españolas se ahorraron en 2018 algo más de 900 millones de euros en la gestión de las facturas recibidas y 511 millones de euros en la gestión de las facturas emitidas. También se ahorraron 662.145 horas en la tramitación de las facturas recibidas y 106.963 horas en las emitidas, además de reducir de manera significativa el impacto medioambiental derivado de la eliminación del uso de papel.

Quién usa la factura electrónica

Por comunidades autónomas, según el número de documentos, tanto en emisión como en recepción, Madrid, Cataluña y Andalucía lideran el ranking; seguidas de las Comunidades del País Vasco y Valencia. En cuanto al número de empresas que facturan electrónicamente por Comunidad Autónoma, 2018 fue un año de cambios. Así, Madrid, Valencia y Andalucía lideran el ranking de empresas que emiten facturas; seguidas de un segundo grupo de formado por Cataluña, Castilla y León y País Vasco.

Por su parte, en recepción, Madrid, Cataluña y Andalucía encabezan el ranking de empresas; seguidas de Castilla y León, Valencia y País Vasco. En cuanto al número de documentos recibidos, Madrid, Cataluña y Andalucía siguen liderando el ranking; seguidas de Galicia, Valencia y Cantabria.

Por sectores, servicios el que sigue liderando, con un 55,92% en emisión y un 58,45% en recepción, el mercado. Le sigue la industria, con el 41,80% de empresas en emisión y el 36,68% en recepción, el sector primario, con el 3,06% de empresas emisoras y el 3,21% de empresa receptoras y otras actividades con el 0,71% en emisión y el 1,66% en recepción.

Por tipo de empresas, son las de mediano tamaño las que emiten más facturas, el 45,48%, seguidas por las grandes empresas, el 22,48 %, las pequeñas, el 23,80% y las micro empresas, con el 8,24%. En recepción de facturas, las que más reciben son las medianas empresas con el 37,57% de las facturas, seguidas por las pequeñas empresas con el 26,17%, las grandes con el 24,48% y las microempresas, con el 11,78%.

La implantación del Suministro Inmediato de Información (SII) -el IVA online- en las Comunidades Forales -País vasco y Navarra- en enero de 2018 ha impulsado el uso de la factura electrónica en estos territorios, favoreciendo la transformación de los procesos internos de muchas empresas transformen sus procesos internos que vean en la factura electrónica un gran aliado para cumplir con la obligación. Algo asimilar ocurrirá en Canarias, en 2019, tras la implantación de SII a principios de enero de este año.

Por su parte, la obligatoriedad de la factura electrónica para los subcontratistas de las AA. PP. ha tenido sus efectos y los seguirá teniendo en el futuro, como se aprecia el incremento de uso de la factura electrónica registrado en las operaciones B2G. La evolución de la normativa de facturación electrónica a las Administraciones Públicas -en vigor desde 2015- ha dado lugar, en 2018, a la obligatoriedad de uso de la factura electrónica para los subcontratistas del Estado. Así, desde el 1 de julio de 2018, las empresas subcontratadas que trabajan para proveedores de las AAPP españolas están obligadas a facturar electrónicamente a los contratistas cuando el importe de los trabajos o servicios supera los 5.000 euros.

Resulta relevante, sobre todo de cara al futuro, el éxito internacional de la factura electrónica y los impulsos dados por la Unión Europea para normalizar su uso entre los países miembros. Un impulso que ha permitido el desarrollo, a lo largo de 2018, de un nuevo formato común de factura electrónica, que es obligatorio en las contrataciones públicas europeas desde el 18 de abril de 2019.