Tiene el objetivo de lanzar la primera emisión de un programa de bonos verdes

El Tesoro Público ha presentado su estrategia de financiación para 2020, ejercicio en el que se estima que la emisión bruta se sitúe en 196.504 millones de euros, un 6,2% inferior a la anunciada a principios de 2019. La emisión neta prevista será de 32.500 millones, inferior también en un 7,1% a la propuesta el pasado año.

El programa de financiación para 2020 “parte de un escenario conservador, que podría revisarse a lo largo del año. El compromiso del Gobierno con la consolidación fiscal y la progresiva reducción del déficit permitirán seguir intensificando la reducción de la ratio de deuda pública sobre PIB”, explica el Ministerio de Economía y Empresa.

Estrategia Financiación 2020

Como principal novedad en 2020, el Tesoro tiene el objetivo de lanzar la primera emisión de un programa de bonos verdes, para contribuir a la financiación de los compromisos de España con la transición ecológica. Para esta emisión, el Tesoro seguirá las mejores prácticas del mercado en el diseño del Marco de Bonos Verdes y se apoyará en la experiencia de otros emisores soberanos y en la labor de armonización a nivel europeo. Asimismo, se garantizará la transparencia en la asignación de los fondos y en la comunicación del impacto de las inversiones.

Está previsto que toda la financiación neta se obtenga a través de la emisión de instrumentos a medio y largo plazo. Se hará frente a 84.969 millones de vencimientos a medio y largo plazo. De esta forma la emisión bruta a medio y largo plazo ascenderá a 117.469 millones.

Por lo que respecta a las emisiones regulares de valores del Tesoro, está prevista la realización de 48 subastas ordinarias de Letras y de Bonos y Obligaciones del Estado. Como regla general, se realizarán dos subastas al mes de cada modalidad. La emisión esperada en estas subastas ordinarias se situará dentro del rango publicado, sin tener que alcanzar el máximo anunciado.

En 2020, el Tesoro Público recurrirá nuevamente a las sindicaciones bancarias para la emisión de determinadas referencias de Obligaciones del Estado. Asimismo, podrá emitir Deuda del Estado mediante colocaciones privadas, que se ejecutarán en la medida en que contribuyan a la diversificación de la base inversora.

El Tesoro prevé continuar este año con su programa de Bonos y Obligaciones indexados a la inflación europea. Se trata de un programa que permite diversificar la base de inversores de la deuda española y que favorece la estabilización de la carga financiera de la deuda. En los cinco años de vigencia, el programa de Bonos y Obligaciones ligados a la inflación ha acumulado un volumen total de 52.921 millones , lo que supone el 5,4% del total de la Deuda del Estado en circulación.

Cierre ejercicio 2019

El Tesoro Público ha completado su programa de financiación de 2019 con una emisión neta de 19.960 millones, lo que supone una reducción del 41,8% sobre el cierre de 2018, constituyendo la menor emisión neta desde 2007, posible “gracias a la buena evolución de los costes de financiación, la progresiva recuperación de la autonomía financiera de las comunidades autónomas y la gestión más eficiente de la tesorería del Estado”.

La emisión bruta ha caído por debajo de 200.000 millones por primera vez desde 2011, situándose en 192.814 millones, un 9,5% menos que en 2018.

El coste medio de las nuevas emisiones se ha situado en el 0,23%, lo que supone una disminución de 41 puntos básicos sobre el de 2018. El coste medio de la deuda en circulación se ha reducido hasta el 2,19%, porque más de la mitad de la deuda emitida por el Tesoro, el 55,4%, se ha adjudicado a tipos negativos.

Las menores necesidades de financiación han permitido un ahorro en el pago de intereses sobre la previsión de principios de año de 2.371 millones. La carga financiera ha sido de 24.357 millones en términos de contabilidad nacional y ha continuado reduciéndose su peso como porcentaje del PIB, que ha caído desde el 2,8% en 2014 hasta el 2%.