Cadbury Schweppes prevé desprenderse de un total de siete fábricas en España que cuentan con más de 1.100 empleados, dentro de su plan de desinversión del negocio de bebidas en Europa.

Concretamente, la compañía alimentaria dispone en la actualidad de fábricas en Madrid, Toledo, Barberà del Vallès (Barcelona), La Coruña y Sevilla, a las que se suman otras dos fábricas de concentrados en Valencia y Tordera (Barcelona).

La empresa anuncia su decisión de desinvertir sus actividades de bebidas en Europa con el fin de reducir su deuda, que en junio se elevaba a 4.300 millones de libras esterlinas (6.288 millones de euros), y buscar entornos más rentables, sobre todo en Estados Unidos.

Sin cierres ni despidos
La compañía Cadbury Schweppes aclaró hoy que la venta de su división de bebidas en Europa, que incluye a la planta sevillana, no conlleva cierres ni despidos, sino que, como se había anunciado, tiene como fin buscar nuevas oportunidades de negocio a la vez que las secciones vendidas pasan a un solo comprador.