Se vuelca en el crédito, que crece un 11%, hasta los 460 millones, en 2019
La asamblea general de socios de Caja Rural del Sur, reunida en Sevilla, ha aprobado, por unanimidad, las cuentas anuales presentadas por el consejo rector de la entidad, así como las consolidadas del Grupo Caja Rural del Sur, a 31 de diciembre del 2019.
En el informe a la asamblea intervinieron el presidente de Caja Rural del Sur, José Luis García-Palacios, así como el director general de la entidad, Guillermo Téllez.
Según se puso de manifiesto en el balance económico de 2019, en este ejercicio la entidad centró todos sus esfuerzos en continuar creciendo mediante una gestión basada en la eficiencia y la reducción de gastos, hasta lograr una posición de solvencia con un ratio del 19,80% en CET1. Tal y como se destacó, esta posición ha quedado recientemente ratificada por parte de la agencia Fitch que otorgó un rating a la entidad con una calificación crediticia a largo plazo en BBB+, situándose así entre las tres primeras del ranking del sector bancario español.
Además, la cooperativa de crédito andaluza intensificó su fortaleza tras haber incrementado la dotación destinada a reservas con 46 millones de euros. Los niveles de liquidez de Caja Rural del Sur situaron el LCR (ratio de cobertura de liquidez) en el 320%.
Desde esta posición, Caja Rural del Sur en 2019 se volcó en el impulso de su actividad comercial destinada a respaldar en todas sus necesidades financieras y de crédito al tejido productivo andaluz y las familias. El crecimiento de la inversión crediticia fue del 11,06 % hasta alcanzar los 460 millones, incrementando su cuota de mercado en todas las provincias andaluzas donde opera.
Este apoyo financiero, con el objetivo de ofrecer al cliente un mejor servicio, más ágil y eficiente, creció un 14,79% en el segmento de empresas, principalmente pymes y cooperativas, mientras que en el de particulares lo hizo en un 11,68%.
Esta confianza otorgada por los clientes a Caja Rural del Sur se vio reflejada en el crecimiento de los depósitos, que ha supuesto la entrada de 517 millones de euros, un 9,63% de crecimiento. El volumen total de negocio de la entidad fue de 11.375 millones al cierre del ejercicio 2019.
Este ejercicio ha destacado también por una intensa gestión en la recuperación de activos improductivos, que ha llevado a la entidad a una reducción cercana al 37% en la cartera de estos saldos.
Este esfuerzo realizado en este ámbito, sumado a la gestión prudente de los riesgos que lleva a lo largo de estos años la Caja, le ha supuesto cerrar el ejercicio con una cobertura de insolvencias de la entidad del 174,22% (110,76% a nivel consolidado), que ha servido para obtener una mejora de la eficiencia recurrente de la entidad.
Según estos ratios, el resultado antes de impuestos y de FEP (Fondo de Educación y Promoción) de Caja Rural del Sur se situó en el ejercicio de 2019 en 62,2 millones, un 31% mayor al ejercicio anterior, y después de FEP en 56,9 millones, teniendo en cuenta que el importe destinado a este fondo se registra como gasto en las cooperativas de crédito.
El resultado neto después de impuestos fue de 51,6 millones frente a los 35,1 millones del ejercicio 2018, lo que supuso un incremento del 46,74%.
Según indicó el presidente de Caja Rural del Sur, José Luis García-Palacios, “desde la posición de solvencia y fortaleza lograda, gracias a la gestión desarrollada en 2019, el objetivo es seguir evolucionando en una senda de crecimiento durante los próximos años, haciendo frente a la difícil situación generada para la economía por el actual escenario de crisis originado con el COVID-19”.
Para ello, Caja Rural del Sur impulsará el apoyo financiero a los clientes y el social a través de la Fundación Caja Rural del Sur como pilares fundamentales de su actividad, fiel al carácter y ADN propio de la entidad como cooperativa de crédito, con un decidido respaldo a todos los sectores productivos para contribuir a dinamizar la economía andaluza en este difícil momento.
Así, García-Palacios indicó que, para intentar minimizar el impacto de los efectos de la pandemia, la entidad ha puesto todos sus recursos a disposición de sus clientes desde que se inició la crisis sanitaria del coronavirus. Este respaldo se ha materializado al destinar 200 millones a moratorias hipotecarias de familias y empresas, y mediante la concesión de 400 millones de las líneas de financiación de créditos ICO para aportar liquidez a las empresas andaluzas.
Así, el presidente de la entidad destacó el firme compromiso de Caja Rural del Sur de reforzar durante este año este servicio a la sociedad y continuar haciendo un gran esfuerzo para estar cerca de las necesidades de los clientes, atendiendo con empatía a familias, cooperativas, pymes, y autónomos.
En este sentido, ante la Asamblea, García-Palacios destacó la labor realizada por el equipo directivo y los más de 1000 empleados de Caja Rural del Sur durante el ejercicio de 2019 y, especialmente, en este año en el periodo del Estado de Alarma, en el que se han puesto marcha los protocolos de actuación adecuados para garantizar el servicio, sin que se haya interrumpido en ningún momento, reforzando la protección y seguridad de clientes y empleados.
Igualmente, en este periodo, la entidad ha potenciado sus canales digitales con la finalidad de facilitar a los clientes el acceso a sus finanzas sin necesidad de acudir a la oficina.
En la actualidad, Caja Rural del Sur, en las provincias de Hueva, Sevilla, Cádiz, Córdoba, y Málaga, cuenta con 669.427 clientes y 149.000 socios. El equipo profesional está constituido por 1.100 empleados que desarrollan su labor desde los servicios centrales y a través de su red de 318 oficinas y 414 cajeros.