Inés Mazuela: “Esta adhesión reafirma el compromiso de UPTA Andalucía con la igualdad efectiva entre mujeres y hombres y nuestra alineación con los ODS”

UPTA Andalucía ha suscrito el documento de adhesión a la Red Andaluza de Entidades Conciliadoras (RAEC) impulsada por el Instituto Andaluz de la Mujer con la que se pretende seguir avanzando en la senda de la conciliación y la corresponsabilidad de las vidas profesionales y privadas de hombres y mujeres.

En este sentido, el IAM pretende, junto con entidades, organismos e instituciones andaluzas, mediante la creación de una Red Andaluza de Entidades Conciliadoras (RAEC) y un modelo de trabajo colaborativo, favorecer la simetría de género en relación con la conciliación y la corresponsabilidad.

Con la adhesión a la RAEC deseamos significar la voluntad de UPTA Andalucía para colaborar en la promoción de la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres mediante el impulso de acciones que contribuyan al diseño de escenarios favorables para que hombres y mujeres puedan conciliar sus vidas profesionales y personales de manera equilibrada y corresponsable, especialmente en el trabajo autónomo.

Igualmente con este acto, UPTA Andalucía se compromete a desarrollar un trabajo colaborativo y sostenido en el tiempo mediante la participación activa en el diseño, implementación y seguimiento del plan de trabajo que se elabore tras la creación de la RAEC.

“Desde su constitución, hace ya casi 20 años, UPTA Andalucía tiene como principio la consecución de la igualdad de género y viene trabajando por reducir las brechas de género, por lo que esta adhesión, no viene más que a ratificar este compromiso con la igualdad, la conciliación y la corresponsabilidad en el trabajo autónomo”, ha declarado la secretaria general de UPTA Andalucía, Inés Mazuela.

Así mismo, esta adhesión refuerza la alineación de UPTA Andalucía con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), y en especial con el 5, Igualdad de Género y el 8º, Trabajo Decente y Crecimiento Económico.

El manifiesto consta de siete principios básicos que giran en torno a la no discriminación, la sostenibilidad social, la redefinición del modelo de ciudadanía y el empoderamiento femenino, entre otros para generar espacios que favorezcan la efectiva igualdad de oportunidades y de trato entre mujeres y hombres, como principio de justicia social y derecho humano universal.