El impacto ha sido muy asimétrico por sectores, regiones y también por niveles de cualificación

El 90% de los trabajadores que han perdido su empleo a lo largo del último año tenían un nivel formativo bajo, mientras que el 95% desempeñaban una ocupación básica.

Así lo revela el boletín Avance del mercado laboral Asempleo-AFI publicado este lunes, que señala que los trabajadores infracualificados son los que más han sufrido durante la crisis del COVID-19, al igual que ocurrió durante la crisis de 2008.

Si bien en términos absolutos los trabajadores más afectados han sido los trabajadores cualificados, en términos relativos, los trabajos más afectados han sido los infracualificados.

Como resultado de la crisis del COVID-19, actualmente (3T20), el 51,1% de los trabajadores españoles se encuentra cualificado para su puesto de trabajo, cifra inferior a la del periodo pre-pandemia (51,3%) y al final de la crisis anterior (53%).

“Los trabajadores con más cualificación tienen menos probabilidad de perder el empleo ante cualquier tipo de crisis. Así, entre las tareas en las que habrá que concentrarse cuando amaine la pandemia, la formación y la inversión en educación tendrán un lugar destacado”, ha destacado Andreu Cruañas, presidente de Asempleo.