“El Ejecutivo tiene que solventar las injustas exclusiones que se están dando con algunos sectores del colectivo”

Para la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (UATAE), la reactivación del escudo social era tarea pendiente y la concreción de estas ayudas fueron valoradas en primera instancia como positivas.

Pero, como indica María José Landaburu, secretaria general de UATAE, “la concesión de estas ayudas está dejando finalmente atrás a muchos autónomos, que están viendo como pese al sobreesfuerzo diario que deben afrontar para recuperar niveles de estabilidad en su actividad económica, han quedado excluidos de los criterios de acceso del Decreto”, además remarca que “no es comprensible que un colectivo como el de autónomos temporales, que tiene su peso mayoritario en las zonas de costa vinculadas al turismo, especialmente afectado por la crisis, se queden fuera de estas ayudas directas”.

Desde UATAE y bajo el marco de la campaña #NingúnAutónomoAtrás han venido trabajando conjuntamente con la Plataforma de Autónomos Temporales Afectados por la Crisis del COVID-19 (PATTAC) la situación de este sector compuesto por 20.000 trabajadores y trabajadoras autónomas que desarrollan su actividad económica concentrada en unos meses del año. Ante esta situación, UATAE reclama que “no se puede dejar una decisión de este calado a la voluntariedad de las Comunidades Autónomas, es necesario que la norma recoja la incorporación de este colectivo como posibles beneficiarios de las ayudas directas”, y como apunta Landaburu “una decisión así provocará el agravio comparativo entre los autónomos temporales por el simple hecho de residir en una u otra autonomía, que permitirá incorporar en algunos casos a los autónomos temporales y en otros no”.

Además, UATAE destaca que la exigencia de mantener la actividad en fecha 30 de junio de 2022 para las personas beneficiarias elimina, de facto, cualquier posibilidad de acceso a las ayudas por parte de los trabajadores autónomos temporales, dado que, por su propia naturaleza, su actividad es discontinua en el tiempo y no permanecen en alta el año completo, aunque igualmente soportan ciertos gastos y obligaciones que cumplen con los parámetros finalistas de las ayudas.