En el evento han intervenido expertos en virología, economía y relaciones internacionales
La ciencia y la vacuna van a marcar un antes y un después a nivel global y serán las que traigan una recuperación fuerte. Esa salida a la crisis será más estable cuanto más inclusiva sea socialmente y cuanto más se asiente sobre grandes consensos políticos que reviertan en beneficios sociales y en un crecimiento sostenible. Son algunas de las conclusiones de la XIII Conferencia anual de Riesgo País de CESCE, celebrada bajo el título “Economía de pandemia y desafíos post COVID19”.
Por tercer año consecutivo, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha inaugurado la conferencia, que se ha celebrado, por primera vez, de forma virtual. La ministra ha agradecido a los trabajadores de CESCE “su excelente trabajo durante los meses más duros de la pandemia” por haber demostrado su “vocación de servicio público”, por dar “respuesta al impacto de la pandemia en el sector exportador español” y por haber adaptado “en tiempo récord” los instrumentos “para proteger a las empresas y a los trabajadores”.
Maroto ha recordado que el confinamiento se convirtió, hace un año, en “un gran sacrificio colectivo para atajar el mayor problema de salud pública que hemos vivido desde hace más de un siglo”. A partir de ahora, ha señalado la ministra, “afrontamos 2021 con esperanza, inmersos en un proceso de vacunación que va a permitir dejar atrás la pandemia y que, sobre todo, va a iniciar la recuperación económica y social; empezamos a ver la luz al final del túnel y, si las administraciones y el sector privado trabajamos juntos, 2021 será el año de la recuperación”. Maroto se ha referido a las estimaciones del FMI, que “ha revisado al alza la previsión de crecimiento para la economía española, elevándola hasta el 6,4%”. “Se prevé que la economía española sea la que más crezca este año en el conjunto de la UE” y esa tendencia positiva, ha afirmado, se mantendrá en el futuro.
Sobre las perspectivas de recuperación, Maroto ha dicho que la clave “ha sido que hemos conseguido amortiguar el daño que la pandemia ha causado en nuestro tejido productivo porque hemos desplegado una ambiciosa red de seguridad para proteger, especialmente, a los sectores más afectados, como la restauración, el comercio o el turismo”. La ministra ha subrayado, en ese sentido, que se ha movilizado “más del 20% del PIB en ayudas directas y medidas de liquidez, dentro del marco del diálogo social”. Para mitigar los efectos de la pandemia, MINCOTUR puso “especial enfoque en proteger a las empresas internacionalizadas”, ha dicho, y para ello “lanzamos un conjunto de medidas que se recogieron dentro del Plan de choque frente a la COVID19 y que ha permitido movilizar más de 2.600 millones de euros”.
En ese proceso, el papel de CESCE “ha sido clave” a la hora de proteger al tejido exportador, ha señalado la ministra. “No solo no interrumpió su actividad ni un solo día, manteniendo sus operaciones habituales, sino que ha puesto en funcionamiento y ha gestionado una de las herramientas diseñadas por el Gobierno para proteger a las empresas del impacto de la pandemia: la Línea COVID19, destinada a asegurar la financiación bancaria de circulante, especialmente dirigida a las empresas exportadoras afectadas por la pandemia”. Maroto ha recordado que esta línea ha sido “la mayor operación de CESCE desde su creación” y ha destacado que recibió el premio del Club de Exportadores a la “Mejor respuesta empresarial frente a la pandemia”, junto a los trabajadores de ICO y COFIDES.
La ministra ha reconocido también otras medidas puestas en marcha por CESCE, como la “flexibilidad en la reestructuración de operaciones que se pueden ver afectadas por la situación, con bonificaciones en las primas resultantes por aplazamientos de pago o ampliación de plazos de pago”. “CESCE ha realizado un gran esfuerzo para adaptar la oferta de seguro por cuenta del Estado para modernizar los sistemas de gestión y todos sus procesos”. La ministra ha anunciado que la compañía seguirá “trabajando para fortalecer nuestro sector exportador y para continuar dando mayor peso a las pymes”. Asimismo, ha asegurado que “el sector exportador español va a ser un pilar fundamental de nuestra recuperación económica en la era post COVID19, como lo fue en la crisis de 2008”. En la misma línea, ha señalado que “para MINCOTUR es una prioridad impulsar la internacionalización de las empresas, especialmente, de las pequeñas y medianas, y así lo recoge el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia” presentado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Maroto ha anunciado, además, que se van “a reforzar los instrumentos y se van a poner en marcha nuevas líneas de apoyo a las empresas, a través de CESCE, ICEX y COFIDES”. “El sector exportador volverá a ser, como en otras ocasiones, un puntal esencial para impulsar la reactivación económica y la modernización de nuestro modelo productivo”, ha dicho. Asimismo, ha reiterado “el compromiso del ministerio de Industria, Comercio y Turismo con las empresas españolas y, especialmente, con el sector exportador español”. Desde el Gobierno, ha dicho, “vamos a seguir al lado de las empresas para apoyaros en vuestro salto al exterior”. “Trabajando mano a mano con CESCE, vamos a seguir apostando por la internacionalización porque nos ayudará a construir una sociedad más próspera en el futuro”, ha concluido.
Durante la apertura del encuentro, el presidente de CESCE, Fernando Salazar, ha señalado que “ésta es una crisis de origen sanitario y su solución, probablemente, sea sanitaria aunque luego haya que aplicar otras medidas”. “La pandemia nos ha afectado a todos, ha segado vidas, todos tenemos amigos o familiares que han muerto por la pandemia. Y ha afectado también a nuestra forma de hacer negocios en el exterior: de hecho, el comercio internacional cayó el año pasado en torno a un 9%”, ha explicado.
Salazar ha remarcado que la pandemia “ha producido un shock simultáneo de la oferta y la demanda en más del 93% de las economías del mundo, algo nunca visto”. Durante todo este tiempo, ha dicho, CESCE ha estado al lado de los exportadores. “El 14 de marzo se decretó el estado de alarma y tres días después salió el Decreto ley que incluía los 2.000 millones de euros de la Línea CESCE COVID19; además, hicimos operaciones a corto plazo por cuenta del Estado, tuvimos operaciones íntegramente digitales, no recortamos los riesgos y hemos cumplido nuestro papel anticíclico”.
Según el presidente de CESCE “la recuperación vendrá con las vacunas pero también con el comercio exterior y con la exportación, que siempre ha sido un factor fundamental para sacar a España de las crisis”.
Acelerar la vacunación
El evento virtual, estructurado en dos bloques, ha contado con la participación de expertos como la viróloga e inmunóloga del CSIC, Margarita del Val; el economista, ex ministro de Industria y profesor de la Complutense e ICAE, Miguel Sebastián; José Juan Ruiz, presidente del Real Instituto Elcano; Cristina Manzano, directora de esglobal, y el director de la oficina en Madrid del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores (ECFR), José Ignacio Torreblanca.
El primer bloque de ponencias, “Economía de pandemia: ¿hasta cuándo?”, ha estado moderado por la directora del área de cuenta del Estado de CESCE, Beatriz Reguero. El ex ministro de Industria y profesor de Economía, Miguel Sebastián, ha abierto el debate explicando que las pandemias “son un fenómeno sanitario pero también, estadístico” y que es “imposible hablar de economía sin hablar de pandemia”. En esa línea, Sebastián ha distinguido tres modelos de lucha frente a la pandemia: “el de inmunidad de rebaño (no hacer nada), mantener la actividad y que la gente se contagie; algunos morirán pero, al final, todo el mundo acabará inmunizado y decaerá; es tremendamente arriesgado por su elevado coste social y por la saturación hospitalaria”, ha dicho. “Un auténtico desastre que fue el modelo de la gripe de 1918”. El segundo, ha explicado, es “el modelo COVID cero: tener totalmente controlado al virus mediante testeo; testear, rastrear, confinar y cerrarse al exterior”. Y el tercero, “el modelo de convivir con el virus, que es el que hemos adoptado en Occidente pero tremendamente largo y con un impacto económico brutal”, ha dicho.
Según Sebastián, “no hay dilema entre economía y salud: los países que antes aborden la salud tendrán un mejor resultado económico; por el contrario, los países inmersos en `el convivir con el virus´ estamos enredados porque una pandemia no es algo lineal sino exponencial y acaba habiendo olas interminables”, ha asegurado. Para el economista, no obstante, “es buena noticia que hayamos tenido vacunas disponibles en menos de un año”.
En cuanto a la economía, según Sebastián, “se ha acertado con la respuesta: aquí hay choque de oferta y demanda, es simultáneo, todas las variables económicas se caen a la vez, y se ha actuado apropiadamente porque se ha actuado sujetando a la oferta (con medidas de liquidez y apoyo a empresas) y sujetando la demanda, sobre todo, a los sectores más vulnerables”.
En cuanto a la recuperación, el profesor ha destacado que “va a ser asimétrica e incompleta”. “Esa recuperación va a ser complicada porque habrá una recuperación de la demanda superior a la de la oferta”. Por este motivo, ha dicho, “los países que hayan optado por sujetar la oferta van a reaccionar mejor cuando venga la ola de demanda”. En ese sentido, “las políticas fiscales y monetarias están siendo muy expansivas y habrá un gran boom de demanda. Y los países que no sean capaces de responder a ello sufrirán cuellos de botella, inflación y déficit exterior”, ha anticipado Sebastián.
Sobre el coronavirus que ha provocado la pandemia, la viróloga e inmunóloga del CSIC, Margarita del Val, ha puntualizado que “hay que conocer primero al enemigo” y ha recordado que “en el día a día, estamos rodeados de agentes muy patógenos pero los conocemos”. En esa línea, ha explicado, el coronavirus de la COVID19 “es uno más, no es particularmente difícil porque se transmite poco; el sarampión se transmite, por ejemplo, seis veces más; este coronavirus no es mortífero, fallece un 1% de los infectados, mientras que el SIDA, por ejemplo, era una sentencia de muerte ya que el 90%-95% sabían que iban a fallecer”. La científica ha señalado, por tanto, que “es un enemigo, uno más del montón” pero ha puntualizado que la diferencia fundamental “es que este virus es tan nuevo que ni una sola persona tenía defensas cuando irrumpió”. “La magnitud de la pandemia viene por la falta de defensas”, ha remarcado.
Del Val ha hecho un llamamiento a la confianza en las vacunas y ha destacado su seguridad y eficacia. “Hemos tenido muchas vacunas que están funcionando y la eficacia es muy alta: lo estamos viendo en las residencias de ancianos, por ejemplo”. La viróloga ha señalado, además, que “con otras vacunas, en 10 años, hemos vacunado lo mismo que con éstas en 10 semanas: eso nos da un perfil de seguridad muy elevado porque tenemos 50 veces más información que con otras vacunas”. “Tenemos que levantar las vacunas”, ha dicho la científica, y “hay que vacunar fundamentalmente a las personas de mayor riesgo. “Este virus se quedará con nosotros”, ha reconocido, y “cuando el virus esté circulando, se reforzará la memoria de las vacunas: lo importante es vacunar a suficiente número de personas de riesgo, ir bajando a enfermedades crónicas; a lo mejor si hemos vacunado al 100% de la población de riesgo, empezaremos a estar bien”.
Vacunas seguras y más rastreo y testeo
Del Val ha puesto el foco en los buenos resultados de la vacunación. “Son vacunas muy seguras, muy buenas, el riesgo es mínimo; tienen una incidencia de 1 entre 100.000 en cuanto a efectos adversos graves, y el virus tiene una probabilidad de provocar un fallecimiento entre 100 casos, es decir, hay una diferencia de 1.000 veces: es más segura la vacuna frente a la infección”.
Sobre las posibles variantes derivadas del coronavirus que ha causado la COVID19, la científica ha asegurado que no es pesimista. “Los coronavirus tienen una capacidad grande de corregir sus errores y tiene una probabilidad grande de escapar a nuestro sistema inmunitario pero tendría que haber de 10 a 15 mutaciones a la vez en una persona y luego contagiarse a otra, y mutar de nuevo, para poder sobrevivir y escapar a la inmunidad”.
Sebastián ha puesto el ejemplo de Reino Unido, que ha apostado por vacunar, testear y modelo COVID cero y ha matizado que “países muy exitosos con la pandemia como China, Vietnam, Taiwan o Nueva Zelanda son tremendamente vulnerables porque no han tenido casos y están sin inmunizar”. “Hasta que no se acabe vacunando a toda la población mundial no se conseguirá la inmunidad total y será no antes de 2022”, ha dicho. En esa línea, según Sebastián, “debemos optar por el modelo de COVID cero”.
En cuanto al rastreo y testeo, el profesor ha reconocido que “son la asignatura pendiente: se ha invertido un millón de euros en la aplicación Radar COVID19 pero las CCAA no han activado los códigos; Reino Unido está haciendo dos test diarios. Tenemos que hacer más vacunas, rastreo y testeo para ir al COVID cero”.
Sobre ese modelo de COVID cero, Margarita del Val ha señalado que aún hay que avanzar mucho en la vacunación, ya que sigue habiendo riesgos. “Depende de cómo sea el enemigo y nuestras armas: éste se transmite de manera silenciosa, es muy difícil localizar a los asintomáticos, aunque se rastree mucho. Este virus tiene eso y, además, la posibilidad de tener reservorios en animales como visones y comadrejas”, ha recordado la viróloga. Además, Del Val ha afirmado que “las vacunas son fantásticas para protegernos del sufrimiento, de las muertes, de las UCIs etc… pero no son capaces de evitar que el virus se multiplique en nuestras fosas nasofaríngeas y eso es un riesgo”. La viróloga ha avanzado, en ese sentido, que “las vacunas esterilizantes son las que evitan todo eso y cuando las tengamos ya podremos avanzar hacia el COVID cero”.
Sebastián ha añadido que “la OMS tendrá que hacer autocrítica sobre esta pandemia”. Y ha reconocido que, “como no tenemos experiencia en pandemias, en Europa no hemos sabido responder de una forma tajante frente a ella”.
Deuda pública y más inversión en ciencia
El debate también ha abordado la elevada deuda pública actual, derivada de las medidas anti-pandemia. Según Sebastián “que la economía española se haya endeudado es lo que tiene que ocurrir, es lo normal y saldremos de esta crisis de deuda con crecimiento”. “Nada que ver con los ratios de deuda que tuvimos en los años de falsa bonanza; soy optimista y creo que saldremos del endeudamiento sin necesidad de adoptar medidas demasiado extraordinarias”, ha aseverado el economista.
Margarita del Val ha puesto como ejemplo la experiencia y preparación en pandemias de los países del Sudeste Asiático y ha reivindicado una mayor inversión en ciencia. “Hay que invertir en investigación científica y prevenir, reforzar muchísimo la salud pública y la atención primaria pero, sobre todo, la prevención: hay que prevenir para que la próxima nos pille preparados”.
Horizonte optimista
En cuanto a la evolución de la pandemia, los expertos se han mostrado relativamente optimistas. Sebastián ha adelantado que, “si logramos un modelo combinado de vacunas y COVID cero, podremos tener un buen verano aunque creo que la recuperación efectiva no será hasta 2022”, ha explicado.
En opinión de la viróloga, “el verano va a ser mejor que el del año anterior pero no nos confiemos: tendremos que ver cuántas personas jóvenes tienen secuelas y persistencias, una vez hayamos controlado a los grandes grupos de riesgo. Para final del otoño-invierno que viene, deberíamos estar muchísimo mejor y nos tiene que pillar mejor preparados: hay que organizar la docencia, la ventilación de espacios interiores, etc., pero vamos a estar mejor”, ha asegurado del Val.
Desafíos: combatir pobreza, desigualdad, desinformación y retroceso democrático
El segundo bloque ha abordado los “Desafíos post-COVID19” para tratar de dar respuesta al interrogante “¿y después, qué?”. Este debate ha estado moderado por el Director de Riesgo País y Gestión de Deuda de CESCE, Ricardo Santamaría, quien ha destacado que “después de este verano la mejoría va a ser notable y vamos a tener una recuperación”.
Sobre las secuelas, qué hemos aprendido y cómo salir de esta crisis, José Juan Ruiz, presidente del Real Instituto Elcano, ha destacado que hemos aprendido cinco cosas: “que nuestro bienestar depende de los demás, somos vulnerables; que la ciencia y los datos son el único antídoto frente a la charlatanería y el populismo; que la capacidad de respuesta de los Estados de todo el mundo se ha debilitado, han fracasado y hay que recomponer la capacidad de respuesta de los Estados; que la política y los buenos líderes importan y, por último, que los paradigmas cambian”.
En la misma línea, Ruiz ha añadido que “la mayor parte de las vulnerabilidades de España vienen de años atrás: llevamos 20 años sin converger con los niveles de renta per cápita de Europa”, ha criticado Ruiz, quien ha lamentado, por ejemplo, que “el 40% de los jóvenes está en paro, más de la mitad de los parados son de larga duración y nuestro mercado laboral es una fábrica de desigualdad”. “Somos una sociedad mucho más desigual hoy, no hemos conseguido diversificar la economía al ritmo de otros países y la pandemia ha acentuado aún más estos factores”, ha dicho. La globalización después del COVID19 va a estar mucho más tocada, más afectada: “España debe ocuparse de su mercado interno pero también de la globalización”, ha destacado.
Sobre los desafíos, la gobernanza y la polarización, Cristina Manzano, directora de EsGlobal, ha centrado la atención en los datos de pobreza. “Según datos de la UE, tenemos un ratio de pobreza del 22% de la población, un dato que sube entre los jóvenes y el cuarto país de la UE no se puede permitir estos datos”, ha criticado. La situación también es “muy preocupante en América Latina, donde los logros de la última década se han retrotraído y todo eso incide en la polarización política”. La periodista ha señalado que “no salimos con la suficiente solidez de la crisis 2008” y eso ha influido ahora.
José Ignacio Torreblanca, director de la oficina en Madrid del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores (ECFR), ha dicho que entramos en esta pandemia con un retroceso democrático generalizado de 14 años. “LLevamos 14 años de regresión democrática en todo el mundo, que es una consecuencia de la anterior crisis de 2008”. Torreblanca ha resaltado los decrecientes indicadores de confianza en las instituciones políticas y medios de comunicación. “La pandemia se debe combatir desde la ciencia y la racionalidad pero también desde la gestión, que ha sido desastrosa a la hora de armar consensos y generar confianza”. En este sentido, ha criticado “los titubeos políticos de algunos líderes caudillistas y populistas” y ha dicho que la desconfianza se ha producido en paralelo a la `infodemia´, una epidemia de desinformación”.
Deuda e inflación
Otro de los asuntos del debate ha sido el peligro del sobreendeudamiento y al riesgo de subida de la inflación. El moderador de este bloque, Ricardo Santamaría, ha recordado que “el endeudamiento ha alcanzado el 350% del PIB mundial”. En esa línea, el presidente del Real Instituto Elcano ha señalado que hay que insistir “en las reformas y en la inversión necesarias para no caer en errores”. En cuanto a esas reformas, ha dicho, “si los sistemas fiscales no son capaces de generar los recursos, el mecanismo es la inflación; incluso habrá defaults, si se hacen las cosas muy mal”. Ruiz ha comentado que “mientras que con las guerras los tipos de interés reales acaban subiendo, con las pandemias, acaban bajando”. “Yo no estaría preocupado por subidas súbitas de tipos de interés porque el mercado los puede aguantar. Estaría preocupado por que los Congresos no sepan aplicar medidas fiscales para combatirlo”, ha dicho.
En esa misma dirección, Torreblanca ha destacado la importancia de prestar especial atención a las consecuencias sociales de las reformas que se pongan en marcha por parte de los Estados y ha tomado como referencia al movimiento de los Gilets Jaunes (chalecos amarillos) en Francia. “Es el ‘canario amarillo’ de las reformas”, ha dicho, en referencia a las consecuencias sociales que pueden desencadenar reformas como las medioambientales y digitales. “Los perdedores en las crisis aparecen, aunque sea tarde y debemos prestar atención”. Al respecto, Cristina Manzano ha recordado que “los fondos de la UE contemplan una partida de Transición Justa” para estos fines pero ha lamentado que, precisamente, “es de las partidas que más recortes han sufrido en los últimos años”. Manzano ha adelantado, además, que ya empieza a calar la idea de “la necesidad de racionalizar la globalización a través de los impuestos”. Asimismo, el presidente del Real Instituto Elcano ha dicho que “la inclusión social y las políticas sostenibles son lo único que puede generar consensos que te permitan avanzar”.
El gigante chino
Acerca de la posición de China y de los difíciles equilibrios geopolíticos en el mundo, Torreblanca ha señalado que “estamos entrando en zona de turbulencias donde las cosas no se van a medir por su impacto económico sino por su efecto sobre las relaciones de poder”.
Por su parte, Manzano ha admitido “la ignorancia de Occidente respecto a Asia”, al contrario que a la inversa, y ha señalado que “las empresas empiezan a necesitar un chief geopolitical officer” para ponerse al mismo nivel. Ruiz ha añadido que si de algo ha servido “el ensayo del COVID19” ha sido para aprender porque “nos jugamos el futuro de la civilización”.
Multilateralismo y cooperación
Manzano ha explicado que “Europa ya es líder en la lucha contra el cambio climático aunque China se quiere erigir en líder”. En cualquier caso, ha señalado, “la economía verde es un buen camino”. Sobre los fondos Next Generation, “debemos felicitarnos por lo que significa el plan y por haber sido capaces de alcanzar un acuerdo en esa línea pero también es verdad que ahora viene el siguiente reto que es cómo se aplican”. “La pandemia ha sido un buen impulso para dar más ímpetu a ese espíritu transformador”, ha concluido.
En ese contexto, Torreblanca ha hecho referencia a la importancia de la cooperación y de las relaciones multilaterales de cara al futuro. “El multilateralismo está en nuestro ADN”, ha resaltado el analista.
Sobre el futuro de la UE y del mundo, Ruiz ha señalado que “el modelo económico va a tener que hacer renuncias: habrá que ir a una globalización con una gobernanza mucho más estricta y habrá que hacer reformas”. Ruiz ha puesto como ejemplo los recientes cambios en EE.UU. “Por fin, Estados Unidos parece europeo: están empezando a invertir en lo que hay que invertir, que es en la gente, en infraestructura humana”, ha concluido Ruiz.
Sector exterior: motor de recuperación
La secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, ha clausurado el evento señalando que “la cooperación internacional será la receta para la recuperación”. Méndez ha celebrado que “ya estamos viendo la luz al final del túnel” y ha dicho que las perspectivas para 2021 son optimistas. “Las previsiones del Gobierno sitúan a la economía española por encima del resto de países de la UE, con un crecimiento del 6,5%”.
Méndez ha dicho que las medidas de apoyo público implementadas hasta la fecha, “como el reciente programa de ayudas directas a empresas (de 11.000 millones de euros); las líneas avales de ICO (de 100.000 millones euros y 40.000 millones de euros de financiación para inversión); los ERTES, los Fondos de la UE y el gran acelerón en la tasa de vacunación” permitirán “mirar al futuro con optimismo”.
La secretaria de Estado de Comercio ha asegurado que “el sector exterior está llamado a jugar un papel muy importante como motor de la recuperación”. Además, ha subrayado que “el plan de la SEC y la labor de ICEX, COFIDES, CESCE y FIEM fueron determinantes “para evitar la destrucción del tejido productivo”. Méndez también ha valorado positivamente la eficacia de los planes puestos en marcha hasta ahora para apoyar a las empresas. “Estas medidas han permitido evitar una caída de la actividad del 25% y la destrucción de 3 millones de puestos de trabajo”, ha concluido.