Repsol alcanzó en el primer semestre del año un beneficio neto de 1.036 millones de euros, un 22,9% inferior a los 1.344 millones de euros registrados en el mismo periodo del ejercicio anterior. 

Sin incluir YPF, que deja consolidar en el Grupo, el resultado neto del primer semestre se situó en 903 millones de euros, con un descenso del 14,6% debido al efecto del valor de los inventarios de hidrocarburos que la compañía almacena como reserva estratégica para el país.

Antonio Brufau, Presidente Ejecutivo Repsol
Antonio Brufau, Presidente Ejecutivo Repsol

Descontado el efecto inventario, el beneficio neto de las operaciones continuadas del Grupo Repsol aumentó un 3,1%, hasta los 894 millones de euros, frente a los 867 millones de euros registrados en el mismo periodo del año anterior.

El resultado de explotación durante los seis primeros meses del ejercicio se situó en 1.966 millones de euros, con un descenso del 6,8%, afectado por el citado efecto del valor de los inventarios. Sin este efecto, el resultado de explotación (a CCS) aumentó un 10,4%, hasta los 1.972 millones de euros.

Por actividades, el área de Upstream (exploración y producción) continuó exhibiendo la fortaleza demostrada en el primer trimestre y aumentó su resultado de explotación un 41,9%, hasta los 1.144 millones de euros. El negocio de Gas Natural Licuado (GNL) incrementó su resultado un 41,1%.

Por su parte, el resultado de explotación de Downstream (refino, marketing, gases licuados del petróleo, nuevas energías, química y trading) se vio directamente afectado por el menor valor de los inventarios como consecuencia de la evolución de los precios de referencia. A ello se sumaron los efectos de la crisis económica, que impactó en los  negocios de química y marketing, compensados parcialmente con la mejora de los márgenes de Refino y GLP.