El consejero de Cultura y Deporte, Luciano Alonso, ha informado de que el director artístico del Museo Picasso de Málaga, José Lebrero, continuará en este cargo durante los próximos tres años al haberse renovado su contrato y haber aceptado una reducción de salario superior al 20%. Alonso ha presidido la reunión del Consejo Ejecutivo del Museo Picasso, que ha acordado además amortizar la plaza de gerente.

 

El consejero ha expresado su “satisfacción” por la continuidad de Lebrero, dado su “buen trabajo” en sus tres años de gestión, a lo que se añade que “pocas veces se ve a una persona que ha entendido la situación de profunda crisis económica que vive Andalucía, España y gran parte del mundo”.

 

En este sentido, el consejero ha destacado que habrá una “extraordinaria reducción del sueldo” de Lebrero, “de más de un 20%”, porque “la idea de seguir dirigiendo el Museo y lo que significa Picasso para él es mucho más importante que cualquier otra situación económica”.

 

Sobre la supresión de la gerencia, ha explicado que sus funciones serán asumidas por el Consejo de Dirección del Museo, que integran el secretario del Patronato, la tesorera, el delegado de gestión económica y el director artístico, lo que “garantizará una mejor coordinación entre el ámbito económico y de contenido del Museo”.

 

Programación

En la reunión se ha acordado asimismo elaborar la programación a tres años, coincidiendo con el mandato del director, y con especial incidencia en octubre de 2013, cuando se cumple el décimo aniversario de la inauguración del Museo.

 

Por su parte, Bernard Ruiz-Picasso, nieto del artista y presidente del Consejo Ejecutivo del Museo, ha manifestado su “alegría” por “seguir trabajando con el mismo director”, que “ha hecho un muy buen trabajo en los últimos tres años”.

 

“Los tiempos de crisis se comparten en todo el mundo del arte, se nota en todos los países, y para que la cultura pueda seguir viviendo con actividades es necesario hacer muchos esfuerzos”, ha añadido Bernard Ruiz-Picasso.

 

El propio Lebrero ha dado las gracias a su equipo, “a la familia Picasso” y concretamente a Bernard, “que ha sido estos tres años un aliado intelectual”. Ha avanzado que en estos momentos “habrá que pensar en los cuarteles de invierno”, que es “lo que está pidiendo la situación general de la cultura en nuestra sociedad”.

 

“Estamos viviendo una situación nueva, de carencia y grandes dificultades, que requiere no retirarse, sino reflexionar sobre cómo podemos rentabilizar mejor aquello de lo que disponemos”, ha dicho el director.