En plena campaña de las elecciones autonómicas echo bastante de menos un debate serio sobre las alternativas que plantean las diferentes fuerzas políticas sobre el futuro de algunas políticas de bienestar para los próximos cuatro años en Andalucía. La primera causa que creo que motiva esta ausencia, es porque de nuevo lamentablemente las elecciones autonómicas vuelven a coincidir con las generales, perdiéndose la oportunidad de un verdadero cuestinonamiento sobre las políticas autonómicas, cosa que cada vez entiendo menos, porque precisamente el gobierno actual pierde la oportunidad de trasmitir muchos de los logros alcanzados. Pero aún así, si existe un subdebate en algunos aspectos básicos como son los modelos autonómicos sobre la vivienda, la salud, las infraestructuras, la educación y los servicios sociales. Pero quedan temas importantes que al día de hoy pasan por encima de las reflexiones políticas y creo que son importantes para el futuro del bienestar de la sociedad andaluza, como son el caso de las políticas de desarrollo local y empleo. Teniendo en cuenta que el modelo de desarrollo endógeno y las políticas de empleo son competencia autonómica, hay que buscar con detenimiento en los programas electorales para averiguar propuestas y medidas relacionadas con éstos aspectos. Y de manera concreta, no se abordan retos que hay que afrontar para la próxima legislatura, entre los que destacaría:

l           Cómo se van a reorientar las políticas de desarrollo regional, teniendo en cuenta las disminuciones de fondos europeos para el próximo septeno que comienza en el 2014.

l           Cúales van a ser los criterios técnicos para subvencionar a los diferentes agentes económicos y sociales, así como a las Administraciones Públicas Locales, con programas finalistas controlados por la Junta de Andalucía.

l           La estabilidad de los proyectos, programas, estructuras, recursos y profesionales que se dedican a esta materia.

l           Y finalmente, cuándo y cómo se va a afrontar la tan necesaria y demandada segunda descentralización a las Administraciones Públicas Locales de las políticas de desarrollo local y empleo. Pues éstas las llevan a cabo con mas voluntad que recursos.

Todas estas cuestiones básicas para el futuro de Andalucía una vez más ha quedado en un segundo plano, y detrás de muchas materias como la política fiscal, exterior o terrorista que al día de hoy son competencia del Estado. De esta manera el electorado en ocasiones se confunde y no tiene información suficiente para valorar por una parte el modelo de gobierno en Madrid, y por otra el modelo de gobierno en Andalucía. Y no es lo mismo.

mariofuentesr@wanadoo.es