El Consejo de Ministros ha aprobado el Real Decreto por el que se desarrolla el contrato para la formación y el aprendizaje y se establecen las bases de la formación profesional dual. Además ha acordado una reducción significativa de coches oficiales.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha manifestado que el Real Decreto tiene como objetivo “mejorar la formación y hacerla más profesional”. “Se trata de cambiar la forma de realizar la formación profesional primando no sólo la formación teórica sino también la formación práctica”, ha dicho.
Sáenz de Santamaría ha destacado que por primera vez formación y empleo se articulan “de una manera coherente y armónica” para cambiar la manera de formar en España y para que la oferta educativa se ajuste a la demanda empresarial. Además supondrá que los estudiantes conozcan cómo funcionan las empresas y tengan la posibilidad de permanecer en ellas cuando acabe su formación.
Contrato para la formación y el aprendizaje
En la misma línea, la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, ha subrayado que la iniciativa pretende mejorar la formación de los jóvenes y mejorar su empleabilidad: “Lo que estamos haciendo es buscar caminos para que la formación se adecúe a las necesidades de la empresa”.La empresa, según Báñez, a través del contrato para la formación y el aprendizaje, se implicará en la empleabilidad de los jóvenes porque la formación estará adaptada a sus necesidades específicas y a “las necesidades reales de cada sector productivo”.
La ministra ha explicado que este contrato tiene que formalizarse por escrito y tendrá una duración mínima de un año y máxima de tres. Después se podría convertir en indefinido. Se aplicará a trabajadores con edades comprendidas entre los 16 y 30 años porque la tasa de paro es muy alta en ese colectivo. “Cuando bajemos de una tasa del 15% la edad máxima se bajará a los 25 años”, ha anunciado.
Fátima Báñez ha subrayado: “No se trata de un contrato basura. Estamos hablando de un contrato que tiene la máxima protección social, incluso la protección por desempleo, algo novedoso desde la reforma laboral en España”.
El tiempo de formación es un mínimo del 25% de la jornada laboral en el primer año y en los años siguientes será del 15%. La formación se podrá recibir indistintamente en centros de formación profesional, en otros centros del sistema educativo o en la propia empresa si tiene un centro homologado, y podrá ser presencial o telemática.
Fátima Báñez también ha resaltado que este tipo de contrato prevé bonificaciones del 100% de la Seguridad Social para las empresas de menos de 250 trabajadores y del 75% para empresas mayores.
Por otra parte, la ministra ha informado de que desde la aprobación de reforma laboral se han firmado 37.310 contratos de formación, casi un 4% más que en el periodo anterior. En los últimos meses el crecimiento interanual de las contrataciones ha sido muy acelerado, pasando del 7% en junio y julio a un 23,7% en agosto y a un 38,8% en septiembre. El número de contratos de formación firmados con trabajadores de limitada cualificación, con estudios primarios solamente, se ha incrementado en un 63,4%.
Modelo dual
Con esta regulación se pretende establecer las bases para la implantación progresiva de la formación profesional dual en España, que combinará la formación en el centro educativo con la formación en el centro de trabajo.
Wert ha comentado que, según la OCDE, una de las causas que explican el porcentaje de desempleo juvenil en nuestro país es la mala transición entre el mundo educativo y el del trabajo, lo que se traduce en una falta de adecuación entre la oferta laboral y la formativa y, finalmente, en el abandono escolar temprano.
Entre las ventajas del modelo dual el ministro ha destacado la vinculación con la empresa. En este punto ha puesto como ejemplo el caso alemán, donde en torno al 65% de los jóvenes que participan en este sistema acaban trabajando en la empresa donde han realizado la formación.
Otra ventaja señalada por Wert es que al ser la empresa, junto al centro formativo, la protagonista de este sistema, hay un mejor ajuste entre las necesidades del mercado de trabajo y la oferta educativa. Por tanto, se logra, a juicio del titular de Educación, “empleabilidad cualificada, mejor ajuste entre oferta y demanda y mejores perspectivas de trabajo para los jóvenes”.
El ministro ha dicho que el Gobierno confía en que esta modalidad de formación profesional, que va a discurrir en paralelo con la formación profesional convencional, sirva para dar una “vía atractiva a los jóvenes que no la encuentran en la vía académica convencional” y con ello contribuya a reducir el abandono escolar.
Foto: Pool Moncloa
