El 29 de mayo de 1950 nace la Sociedad Española de Automóviles de Turismo S.A. (Seat) fruto del acuerdo entre el Instituto Nacional de Industria (INI) y la FIAT. La compañía se constituye con un capital de 600 millones de pesetas, repartidos de la siguiente manera: el 51% pertenece al INI; el 42% a un conglomerado de bancos y el 7% a FIAT. Su primer director fue José Ortiz de Echague. La fábrica automovilística se localiza en la Zona Franca del Puerto de Barcelona. El 13 de noviembre de 1953 sale de la fábrica el primer Seat, es el modelo 1400, con 44 cv y 120 Km/h de velocidad máxima. En realidad era una copia del FIAT 1400. En la fabricación de este modelo, Seat dobla sus objetivos, con la utilización del 80% de piezas nacionales. La fábrica contaba con 925 empleados y se fabricaban cinco coches al día.

La escasez de medios de transportes motorizados en la España de los 50 unida a la fuerte protección del mercado interior se combinaron para desencadenar una multitud de iniciativas constructoras tanto de automóviles como de motos. El atractivo de un mercado con bajas importaciones y en rápido crecimiento a partir de 1950 atrajo a algunas compañías transnacionales que vieron factible sacar rendimientos a su tecnología cediéndolas a sociedades españolas: FASA-Renault; Autonacional; Citroën Hispania; Munguía Industrial; Chrysler; Authi.

En 1955 nace el Seiscientos, copia del modelo de FIAT 600. El lanzamiento del Seiscientos supone para la sociedad española de la época  la motorización de los españoles, pues el modelo 1400 era bastante caro. Para fabricar el Seiscientos se invierten 3 millones de dólares. Éste supone el gran empuje de la Seat. Los años sesenta supone el esplendor de la compañía que crecía al ritmo de la economía española.

A principios de los años 70 Seat se había consolidado como primer fabricante del país. El Seat 600 fue el coche más vendido de Finlandia entre 1970 y 1973.En este año abrió sus puerta el Centro Técnico de Martorell. Allí se gesta el primer diseño independiente de FIAT, el Seat 133. La plantilla ya rebasaba los 30.000 empleados y se fabricaban 1.900 coches al día.

En la década de los 70 Seat empieza a sufrir la crisis del petróleo de los años 1973 y 1979 y la apertura económica de la economía española trajo consigo el desembarco de las multinacionales automovilística y la cuenta de resultado de Seat empieza hacer negativa. Con la llegada de la democracia, el INI, heredero de las viejas empresas nacionales, decide vender o cerrar las empresas públicas deficitarias entre la que se encuentra Seat, en un doloroso proceso que se denominó "reconversión industrial".

A principios de la década de los 80, Seat empieza a buscar un socio industrial para salir de la crisis que arrastraba tras separarse de FIAT. Al final, Wolkswagen firmó con Seat un acuerdo para que la española produjera algunos de los modelos de la compañía alemana. Para la venta de Seat a Wolkswagen el gobierno español tuvo que hacer un considerable esfuerzo económico. Se inyectaron en la caja de Seat 200.000 millones de pesetas para luego venderla a Wolkswagen por una cantidad simbólica.

Ya bajo control alemán, Seat entra en beneficios y en 1993 se inaugura la enorme y ultramoderna planta de Maltorell. Esta es una de las más modernas de Europa y fue inagurada por el Rey Juan Carlos en 1993. En el año 2002 salieron de esta fábrica más de 450.000 vehículos. Tras los malos resultados económicos de los años 2007, 2008 y 2009, Seat ha iniciado un proceso de cambio de imagen, abriéndose hacia un público más joven que permitirá a la compañía conseguir mayor cuota de mercado y rentabilidad para conseguir entrar en beneficios.

A lo largo de su vida Seat ha demostrado su capacidad para reinventarse y seguir adelante. No en vano, 60 años de historia sobre ruedas le avalan.