La restricción del crédito a las empresas y las perspectivas económicas han sido los dos ejes que han centrado la jornada “Los retos de la banca”, celebrada hoy en el marco del certamen Forinvest, que se clausura mañana en Feria Valencia.

El más crítico en este sentido ha sido el presidente de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), Salvador Navarro, que ha sido claro y contundente en su intervención: “La banca coge dinero barato del BCE, compra bonos de las Administraciones al 5% y sigue sin trasladar nada al sistema productivo. La banca necesita al Estado y viceversa, y eso supone desprotección a las empresas y a las familias. Ese es el sentir empresarial”, ha asegurado.

Navarro ha explicado que la situación, lejos de mejorar, sigue empeorando. Y además ha recalcado que en el caso de la Comunidad Valenciana el escenario es todavía más preocupante.

Así, basándose en datos del Banco de España, el representante empresarial ha indicado que el acceso al crédito de las empresas valencianas cayó un 7,4% en tasa interanual en septiembre de 2012 frente a la caída media en España del 4,6%. “Esto supone una clara desventaja competitiva de las empresas valencianas respecto al resto de las españolas y algo habrá tenido que ver la pérdida de entidades financieras locales”, ha aseverado.

El presidente de la CEV ha cerrado su turno animando a los bancos “a dar crédito a las empresas, como han hecho siempre, porque, si no, el sistema productivo y por tanto la sociedad española no van a superar los retos futuros”.

La banca parece augurar una respuesta positiva. Al menos eso se deduce de las palabras de Rafael Doménech, representante del Servicio de Estudios de BBVA. “2013 es el año en que previsiblemente la economía española tocará fondo; y desde el punto de vista del sistema financiero, será el año de la consolidación, de la gestión del ciclo y de la reactivación del crédito. 2014 marcará el inicio de la recuperación”, ha sostenido.

El cambio va a ser posible, a su juicio, gracias a la progresiva mejora de la confianza exterior en la economía española, las menores tensiones financieras y la menor incertidumbre, así como la recuperación de la UEM. De hecho, según ha explicado, ya 2012 fue mejor de lo que se esperaba en primavera, por el menor efecto del ajuste fiscal sobre la actividad económica y la mejor contribución que la prevista de la demanda externa, entre otros factores.

Respecto a la economía mundial, Doménech ha señalado que su crecimiento va a continuar siendo muy heterogéneo durante este año y el próximo, aunque ha recalcado que ya en 2013 hay “una clara mejora de la percepción”.

En opinión de Doménech, el principal reto del sistema financiero español tiene que ver con el riesgo macroeconómico, algo en lo que ha insistido también Santiago Carbó, Catedrático de Economía y Finanzas de la Bangor Business School.

Carbó ha puntualizado que el sector financiero refleja los problemas de deuda del conjunto de la economía y que el escenario macroeconómico “no ayuda”. “Hemos empezado a hacer cosas bien –ha dicho en referencia a la reestructuración- pero quedan muchos retos pendientes”. Entre los desafíos a corto plazo, ha destacado la necesidadde cambiar el modelo de negocio, el crédito a las PYMES y la recuperación de la confianza de la sociedad.

El analista Marino Sánchez-Cid, responsable de Financial Advisory Services de BDO, ha participado también en la jornada dando su particular visión sobre los retos y asignaturas pendientes de la banca –respecto a la gestión, supervisión, regulación, análisis de riesgos,…- y se ha referido asimismo a la demanda de crédito por parte de las empresas.

Al respecto, ha señalado que el crédito no puede ser el motor de las recuperaciones; “el crédito las sucede, no las anticipa”. En este sentido, ha mantenido que los bancos, conscientes de los “errores cometidos”, ya no van a dejar de ser conservadores respecto al crédito.

En su opinión, los proyectos en estado inicial deben acudir a fórmulas como Venture Capital o Business Angels, mientras que para recomponer balances se puede optar por la venta de activos, dar entrada a socios industriales o el capital riesgo.

La jornada ha concluido con la participación de Antonio Cortina, del Departamento de Estudios del Banco Santander. Cortina se ha centrado en la situación actual y retos del sistema financiero, distinguiendo siempre entre los diferentes tipos de entidades, que él ha clasificado en tres: sólidas, autónomas, y nacionalizadas.

A su juicio, la morosidad va a continuar deteriorándose pero el riesgo inmobiliario “ya está cubierto”. Cortina considera que el proceso de saneamiento está siendo profundo y va a tener un buen resultado para el sistema, aunque se mantienen algunos problemas de liquidez y capital e interrogantes vinculados a los nuevos marcos regulatorios. El representante del Banco Santander ha destacado como claves de gestión “diversificación, gestión del riesgo y eficiencia”.