La consejera de la Presidencia, Mar Moreno, ha subrayado que Andalucía es la comunidad autónoma que más recursos destina a la cooperación internacional al desarrollo, según los planes del Estado en los que se fiscaliza el conjunto de estas ayudas.
Moreno ha destacado que las cuentas que Andalucía consigna a este fin “son claras y públicas” ya que están “permanentemente fiscalizadas”. “La Cámara de Cuentas ya contempla el examen de los estados financieros de la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional al Desarrollo (AACID) en su plan ordinario para este ejercicio”, ha explicado.
Más del 80%, a países prioritarios
La también Portavoz del Ejecutivo andaluz ha destacado que más del 80% del presupuesto anual de cooperación se dirige directamente a los países de destino. Concretamente, la Junta destinará a las ayudas al desarrollo el próximo año 91,6 millones de euros, lo que supone un 14,5% menos respecto a 2010. De esta cantidad, 86,6 millones serán gestionados por la AACID.
Durante la presentación de los presupuestos de la Consejería de la Presidencia en el Parlamento el pasado 4 de noviembre, Moreno valoró que la Administración andaluza continúa teniendo entre sus prioridades una política exterior “solidaria y social”.
Como novedad para 2011, la Junta destinará cinco millones al Fondo Andaluz para la Promoción del Desarrollo (FARPRODE), cuya finalidad es fomentar el espíritu emprendedor en los países prioritarios de la cooperación andaluza a través de programas de microfinanzas.
De igual forma, durante el próximo año, se iniciará el proceso de elaboración del II Plan Andaluz de Cooperación para el Desarrollo (PACODE) 2012-2015, para lo que se tomará como base la experiencia acumulada del desarrollo del I PACODE.
Durante la presentación de estas cuentas, la titular de la Presidencia hizo hincapié en que Andalucía “aún con menos recursos, va a seguir haciendo el mayor esfuerzo de todas las comunidades autónomas” en esta materia, con una especial atención a las ONG andaluzas, a las que garantizó que no se iba a “detraer ni un solo euro a la línea de cooperación que ejecutan para no dañar su fortaleza, ni interrumpir sus programas”.