General de Alquiler de Maquinaria, S.A. cierra el primer trimestre del ejercicio 2013 con una mejora sustancial sobre el mismo período del año anterior, tanto en términos de márgenes como en cifra de endeudamiento.

La cifra de negocio del primer trimestre asciende a 33,3 millones euros, 20,8 millones en España (-18% sobre año anterior), 2,0 millones en Portugal (-44% sobre año anterior) y 10,5 millones en el resto del negocio internacional (+11% sobre el año anterior).

A pesar de que la cifra de negocio es en su conjunto un 13% inferior a la del mismo período de 2012, el margen Ebitda Recurrente antes de provisiones, que asciende a 10,5 millones, mejora tanto en términos relativos (32% sobre ventas actual frente al 25% del año anterior) como en términos absolutos (+9% sobre año anterior).

Así las pérdidas acumuladas se reducen en un 50% (-7,3 millones a marzo 2013 frente a los –14,5 millones del ejercicio anterior):

En lo que se refiere al endeudamiento, con posterioridad al cierre del trimestre, tal y como se ha comunicado, la compañía ha reestructurado el bono convertible quedando este reducido a la cifra de 13 millones euros (frente al saldo de 33 millones a cierre del ejercicio 2012) que además tienen el carácter de préstamo participativo, esta restructuración sólo está pendiente de los trámites de ratificación por la Junta de Accionistas de la compañía y de su posterior inscripción en el Registro Mercantil.

Por tanto, podemos decir que la deuda financiera neta de la compañía asciende a 261 millones euros, a los que hay que añadir 72 millones euros en instrumentos participativos convertibles (59millones de euros en manos de entidades financieras accionistas y 13 millones de euros en manos de bonistas), suponiendo una reducción del 29% sobre el mismo periodo del ejercicio anterior en el que la cifra era de 367 millones de euros a los que había que añadir 59 millones de euros de préstamos participativos:

La compañía continúa con su estrategia basada en la reducción de deuda mediante la desinversión en activos para adaptar su capacidad instalada a las condiciones de mercado, la mejora de márgenes asociada a la reducción de costes y el crecimiento del negocio internacional.