La multinacional aragonesa Saica se mantiene firme en su apuesta por el transporte intermodal por ferrocarril y, durante 2012, utilizó en sus operaciones logísticas una cifra cercana a los 1.200 trenes. En concreto, el ciclo integral del Grupo movió el año pasado, en la División de Paper-España, 4 millones de toneladas, 600.000 de las cuales lo hicieron a través de sus corredores ferroviarios.

Semanalmente, desde su fábrica en El Burgo de Ebro (Zaragoza) salen diez trenes  con 640 toneladas de bobinas, y entran otros tantos con balas de papel para reciclar, todos ellos operados por su partner ferroviario Comsa Rail Transport. De este modo,  el pasado año se dejaron de emitir 8.000 toneladas de gases de efecto invernadero y, diariamente, se hicieron 63.000 kilómetros menos por carretera, unas cifras que ponen de relieve el compromiso de la compañía con el medio ambiente.

Así el volumen transportado en tren ha experimentado en los últimos cinco años un crecimiento del 350%, representando a día de hoy un 15% del total (y un 20% de los flujos ibéricos de la Compañía) frente al 3% que rige en el mercado. Para este 2013 la multinacional prevé un aumento de frecuencias de hasta ochos convoyes semanales más en los actuales corredores, así como la inclusión de otros nuevos, principalmente con el objetivo de cruzar la frontera pirenaica y llevar trenes directos a Francia, algo que podría impulsar el objetivo de que en 2015 el ferrocarril alcance la cuota del 25%.

Además de los beneficios medioambientales, el uso de este medio de transporte aporta otras importantes ventajas, como que se produzcan menos daños en la mercancía, que se haya alcanzado un nivel de puntualidad del 99% o que, en trayectos largos, los tiempos de tránsito puerta a puerta sean inferiores a los de carretera.

La vocación ferroviaria de Saica viene de lejos, aunque tanto el continuo crecimiento de la compañía como la rigidez del mercado ferroviario mantuvieron la cuota del tren en cifras discretas. Sin embargo, desde el año 2008 y gracias a la colaboración con Comsa, se dieron las condiciones necesarias para el desarrollo logístico del tren partiendo de una visión a largo plazo para conseguir una operación optimizada y eficaz.

Se optó por sustituir los vagones convencionales por unos rebajados y se empezaron a utilizar cajas móviles que se trasvasan directamente de tren a camión y viceversa, algo que permitió reducir los tiempos de carga y descarga, dando a la terminal ferroviaria una mayor capacidad. Además, para la optimización de los trenes, las premisas básicas fueron por un lado, alcanzar la máxima carga y ocupación por caja con una adecuada distribución de la mercancía y, por otro, remolcar el máximo número de cajas en cada tren en función de la tracción y de la línea utilizada.

Desde entonces, el volumen ha ido creciendo de manera exponencial y, si en 2009 se iniciaron los flujos con destino y origen Portugal (una operación que marcó un hito ya que se trató del primer transporte ferroviario internacional realizado con medios 100% privados en la península Ibérica), hoy son cuatro los corredores ferroviarios que utiliza la multinacional: Zaragoza – Portugal, con tres trenes semanales; Zaragoza – Madrid – Sevilla, con otros tres; y Zaragoza – Levante y Zaragoza – Barcelona con dos trenes a la semana.

Todo ello ha sido posible gracias al trabajo de Comsa Rail Transport, que puso a disposición de Saica su experiencia y los medios para realizar una gestión completa del proceso más allá del transporte por ferrocarril en sí. Un equipo de 70 personas que se encarga no sólo del movimiento de las tres locomotoras, 80 vagones y 250 cajas móviles, sino que también asume las funciones de coordinación, administración de terminales o distribución capilar entre otras.