El Gobierno uruguayo ha anunciado hoy el concurso para la construcción de este ambicioso proyecto que dotará a la ciudad de un centro MICE de relevancia internacional
El Gobierno uruguayo ha dado un paso más hacia la consecución de un segmento turístico clave para el país: la organización de congresos, reuniones y viajes de incentivo para empresas (MICE en sus siglas en inglés). En este sentido, Uruguay ha anunciado en Punta del Este el concurso público para la construcción y gestión durante 25 años del Centro de Convenciones y Recinto Ferial de la ciudad, un megaproyecto dotado con más de 19 millones de euros de presupuesto emanados directamente desde el propio Gobierno.
Uruguay ha anunciado hoy el concurso público para la construcción y gestión durante 25 años del nuevo Centro de Convenciones y Recinto Ferial de Punta del Este. Un proyecto financiado con más de 19 millones de euros que busca asentar el segmento MICE y CCI en el país y situar a Uruguay como destino de referencia dentro del circuito empresarial internacional.
El Centro de Convenciones constará de una sala principal para hasta un máximo de 5.000 participantes además de diferentes salas cubiertas equipadas con lo último en tecnología para este tipo de eventos. El Gobierno tiene prevista la cesión, en una primera etapa, de hasta 6.000 m2 edificables, pudiendo ser extensible en siguientes etapas del proyecto dependiendo de la demanda.
El plazo de presentación para las diferentes propuestas es de 45 días. En un principio, el inicio de las obras está previsto para antes de fin de año bajo un diseño base del arquitecto Carlos Ott, que, entre otros trabajos, ha diseñado la reforma de la Ópera de París. Uruguay realiza al año unos 45 eventos de nivel internacional, lo que le ubica entre los primeros 50 destinos del mundo para MICE, según el ranking ICCA.
Por otro lado, el Gobierno uruguayo también acaba de inaugurar la primera Base Náutica del país en la zona de Santo Domingo de Soriano. Utilizando las antiguas instalaciones del hotel Olivera, la base se enclava dentro de una villa de 1.300 habitantes que es considerado como el lugar donde estuvo el primer asentamiento permanente de los españoles que llegaron a Uruguay en los siglos XI y XII.
