Los precios se disparan, la desviación del Índice de Precios al Consumo (IPC) duplica la previsión oficial por la carestía de las productos básicos, sube el precio del aceite, el pan, la luz, el butano, la leche, los huevos, carburantes, enseñanza, vivienda, frutas, legumbres, derivados lácteos, conservas, … etc. Esta es la realidad de los titulares de periódicos diarios andaluces y españoles a finales de 2007 y creemos que será la tónica durante todo el año 2008.

El hasta hace poco tiempo, culpable indiscutible de todos los delitos habidos y por haber en relación a la subida del IPC y la inflación "El Pollo"; le han salido demasiados competidores dispuestos a llevarse la merecida fama de que gozaba el titular indiscutible. Dispuestos a aliviarle de tanta culpa arrastrada durante muchos años en los que por su culpa y por su gran culpa subía nuestra preciada y cada vez más castigada cesta de la compra.

El pollo era culpable de nuestra pérdida de poder adquisitivo, su inteligencia ha sido tal que durante años conseguía que el valor nominal de nuestros salarios fuese muy superior a su valor real, haciendo crecer la inflación de todo un país.

Pobre pollo, que va a dejar de hacer lo que le de la gana con nuestra economía. Pobre pollo, que pierde protagonismo respecto a sus productos competidores más amigos. Nuestro "pollo" se nos va de compras.

La espiral que se puede generar en nuestra economía a partir de este año que comienza, puede ser distinta en función de determinadas variables micro y macroeconómicas: inflación, IPC, desempleo, políticas fiscales y/o monetarias…etc.

La producción y el mayor empleo en nuestra región y en general en España está ligada fundamentalmente al ladrillo. Cuando la producción es constante, la tasa de inflación es igual a la tasa de crecimiento del dinero. El problema puede surgir cuando aumenta la inflación mientras la producción está disminuyendo o no está aumentando, lo que se denomina "La Estanflación".

La Estanflación es un fenómeno que puede ocurrir en nuestro país durante el año 2008, ante la previsible bajada de la venta de viviendas en el sector de la construcción y el posible aumento del desempleo.

Para evitar cierto fenómeno sería necesario un ajuste dinámico entre la producción y la inflación, dependiendo en todo momento dicho ajuste de las expectativas previstas.

Ante la ralentización del sector de la construcción y la reacción que se detecta de los dirigentes actuales, nos encontramos ante un devaluado intervencionismo Keynesiano del Estado en nuestra economía, el cual expone que, ante épocas de crisis y menor demanda e insuficiencia de la colectividad debe intervenir la Administración Pública. Dicha intervención, puede ser a través de una expansión monetaria, un aumento de la inversión pública u otras formas de acción estatal.

Nos encontramos ante un posible año de transición, ante un intervencionismo del estado basado en la construcción masiva de Viviendas de Protección Oficial, en régimen tanto autonómicas como municipales. Con ello se prevé al menos que no aumente el paro ante la bajada de construcción de viviendas de renta libre. 

El problema que se puede plantear es la paralización actual del 90% de lo Planes Generales de Ordenación Urbana de los municipios, y su consiguiente bloqueo de urbanizaciones tanto de VPO como de otras obras.

Algunas explicaciones y soluciones que nos dan nuestros dirigentes a la subida del IPC y la inflación, son de auténtico calado económico y social, tales como: " la subida de la inflación es debida  a que el ciudadano no ha interiorizado el valor del euro"; "coman conejo en vez de pavo"; " los precios de los productos suben porque no tenían su valor real"… y un sin fin de razonamientos que dejan mucho que desear.

En fin, mientras el presidente del gobierno cuestione si un café cuesta 80 céntimos de euro, y el ministro de economía afirme que la crisis es debida a que cuando tomamos un café dejamos un euro de propina. La cosa se nos pone poco seria para este año 2008. 

Pobre pollo, que será de tí sin tu eterna culpa.

josevalerog@yahoo.es