La economía española ha permanecido estancada en el tercer trimestre y sólo crecerá muy ligeramente (0,1 %) en el cuarto, según las previsiones presentadas hoy por el Instituto Nacional de Estadística de Francia (INSEE).

Como en el caso de Italia, el inicio de la progresión de la actividad en España en los tres últimos meses del año se deberá al dinamismo de las exportaciones, unida a la recuperación de las inversiones y a una “atenuación” del descenso del poder adquisitivo en la segunda mitad del año, explicó en conferencia de prensa Dorian Roucher, uno de los autores del estudio de coyuntura del INSEE.