Renfe puso en servicio a finales de la semana pasada el sistema de control de acceso en la estación de Cercanías de San Bernardo, como parte del proceso de mejora de la gestión y seguridad en las estaciones del Núcleo de Cercanías de Sevilla.

Los trabajos comenzaron este verano con la instalación de todos los elementos que conforman el nuevo sistema de control de acceso (tornos, barreras, cableado, etc.), tanto en la zona del vestíbulo como en el pasillo de interconexión con Metro. Una vez concluida esta primera fase se implantó el sistema operativo para, en último término, conectarlo con el centro de control de operaciones.

Desde ahora, todas las estaciones de Cercanías de Sevilla cuentan con sistemas de control de acceso, bien sean tornos o máquinas canceladoras de billetes. De esta forma, independientemente de cuál sea la estación de origen o destino, el viajero dispone del dispositivo necesario para formalizar su billete antes de subir al tren, requisito indispensable para todos los títulos de transporte.

La estación de San Bernardo pertenece al Núcleo de Cercanías de Sevilla y es, junto a Santa Justa, la de mayor volumen de usuarios del Núcleo con más 11.000 viajeros diarios. En ella confluyen tres líneas: la C-1 (Lebrija-Utrera-Sevilla-Lora del Río), Circular C-4 (Santa Justa-Palacio de Congresos) y C-5 (Virgen del Rocío-Benacazón).

Utilización de los controles de acceso

Con la entrada en servicio de los tornos en San Bernardo se completa la instalación de controles de acceso en las estaciones del Núcleo de Sevilla. Todas disponen así de tornos o máquinas canceladoras para los diferentes títulos de transporte de Cercanías.

Para acceder al servicio, como conoce el cliente habitual de Cercanías, la pauta a realizar es la siguiente: en la estación de origen, el viajero adquiere el correspondiente título de transporte, bien en taquillas o en máquinas autoventa. A continuación debe pasar el billete o abono por el torno o máquina canceladora de la estación para su lectura. A la llegada a la estación de destino debe realizar este mismo paso, acercar el billete al torno o máquina canceladora para cancelar el mismo.

La pauta es, por tanto, muy similar a la establecida en controles de acceso de otros sistemas de transporte público, en el caso de Sevilla, similar al utilizado en el Metro.

Instalación de controles de acceso en el Núcleo

La instalación de tornos comenzó en 2011 en la Línea C-5, concretamente en las estaciones de Benacazón, Sanlúcar la Mayor, Salteras y Villanueva del Ariscal. En la C-2 (Sevilla-Cartuja) se pusieron en marcha en 2012 en las estaciones de Cartuja, Estadio Olímpico y San Jerónimo, coincidiendo con la puesta en servicio de la línea.

En marzo de 2012 se instalaron en Utrera, Dos Hermanas, Virgen del Rocío, Lora del Río, Los Rosales y Brenes. En el caso de El Cáñamo, La Rinconada y Palacio de Congresos, entrarían en servicio en mayo de ese mismo año.

La última en contar con estos controles de acceso ha sido San Bernardo, en el centro de la capital hispalense, que ya dispone de tornos para regular el acceso de los viajeros a los distintos servicios de Cercanías que operan en esta estación.