Calidad nutritiva, fomento de la biodiversidad, uso de recursos y materias primas naturales, reducción de la contaminación medioambiental y desarrollo rural y de empleo. Estos son algunos de los principales objetivos de la agricultura ecológica, un sistema de elaboración de productos agrarios que en los últimos años ha experimentado un importante crecimiento, tanto de producción como de demanda.

La agricultura ecológica contribuye a mantener la salud de los consumidores al no utilizar biocidas ni semillas transgénicas. Con los alimentos biológicos se recupera el verdadero sabor de los alimentos, siendo equilibrados y muy ricos en nutrientes. Además, se conservan mejor que los convencionales.
El uso del compost, como base de fertilización, hace del suelo un medio adecuado para albergar vida y alimentar a los microorganismos que en él habitan, que son los que van a poner a disposición de la planta los elementos que necesita para su correcta alimentación. Por el contrario, la fertilización química mata la vida microbiana del suelo.

La agricultura ecológica tiene además muchos otros beneficios para el medio ambiente:
– Fertiliza la tierra y frena por tanto la desertificación.
– Favorece la retención del agua y no contamina los acuíferos.
– Fomenta la biodiversidad.
– Mantiene los hábitats de los animales silvestres, permitiendo y favoreciendo la vida de numerosas especies.
– Contribuye de manera eficaz a la descontaminación del aire, el agua, el suelo, la flora y la fauna.

Los beneficios de la agricultura ecológica se extienden incluso al ámbito social, impulsando la creación de puestos de trabajo en el campo. Esto permite la producción, el comercio y el consumo local, como bases de la economía de las regiones.

A contrario de lo que se cree, cabe resaltar que los productos biológicos no resultan más caros para la economía familiar. Protegen mejor la salud de la familia y, además, su contenido en nutrientes por unidad de peso es superior al de los convencionales, por ello cubren mejor las necesidades con menor cantidad que los otros.
Según datos oficiales, el 60% de las enfermedades degenerativas están relacionadas con la comida. El consumo generalizado de alimentos biológicos, supondría un gran ahorro tanto para las familias como para los gobiernos.
El Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca ha comenzado, por su parte, a aplicar el Plan de acción de la agricultura ecológica, en que se enmarcan acciones como la aprobación del Real Decreto por el que se reserva en exclusiva para la agricultura ecológica los términos eco y bio y acciones como campañas de información y promoción. En este sentido, se está llevando a cabo una campaña informativa cofinanciada por UE que durará dos años. Esta campaña tiene como objetivo promover la producción y el consumo en España de productos ecológicos. Con ello, el Gobierno quiere que, una vez conseguida la estabilización de la producción, se le de un nuevo enfoque para aumentar el consumo de este tipo de productos dentro de España. Con esto también se pretende depender menos de la demanda externa, ya que el 90% de los productos ecológicos producidos en España se consumen en el extranjero.

Según el panel de consumo alimentario, el consumo de productos ecológicos ha pasado del 3 al 5 por ciento del total. En 2005 la superficie destinada al cultivo ecológico superó las 800.000 hectáreas, con un crecimiento superior al 10% en relación al año anterior, situándose en los primeros puestos, tanto a nivel comunitario como a nivel mundial.

¿Por qué al consumidor le cuesta comprar ecológico?
Los datos de un estudio hecho sobre alimentación ecológica por el Observatorio del Consumo y la Distribución Alimenticia reflejan que más de un 72% de los entrevistados conocen lo que es un producto ecológico. Dato sorprendentemente elevado teniendo en cuenta que más de la mitad de los entrevistados no encuentra estos productos en su establecimiento habitual de compra. A este respecto la marca VALMASERA está haciendo un gran esfuerzo para que sus productos se puedan encontrar fácilmente en las grandes superficies. VALMASERA abarca toda una amplia gama de productos procedentes de la agricultura ecológica: desde todo tipo de conservas de verduras y legumbres hasta la más amplia variedad de pastas italianas, pasando por dulces, cafés, salsas, aceite de oliva Virgen Extra, zumos, vino e incluso productos lácteos como yogures y huevos. La distribución en grandes supermercados y la variedad de sus productos son las dos características principales que diferencian VALMASERA de otras marcas, y la caracterizan por ser la más amplia y de más presencia en el mercado español.

Desde VALMASERA, saben que la mejor manera de hacer llegar los productos ecológicos al mayor número de consumidores posible es tratándolos como alimentos a los que todos podamos acceder y con productos que resulten del gusto de todo tipo de personas. De esta manera, se han convertido en los primeros en hacerlo posible.

Los consumidores eligen los productos ecológicos por tres motivos: son más saludables, tienen más buen gusto y una mayor calidad. Por grupos de edad, el consumo más importante se da entre los entrevistados de edades comprendidas entre los 46 y 55 años. Y por comunidades, las islas Baleares es donde más se consumen y Cantabria donde menos.