El pasado lunes día 2 ha tenido lugar una primera reunión de trabajo de los Consejos Reguladores de Condado de Huelva, Montilla-Moriles y Jerez para poner en marcha un proyecto de investigación conjunto sobre los efectos beneficiosos para la salud del consumo moderado de los vinos finos, las manzanillas y otros vinos de crianza biológica. La reunión tuvo lugar en la sede del Consejo Regulador de Jerez y en la misma participaron igualmente representantes de FIVIN, la Fundación para la Investigación del Vino y la Nutrición.
Los vinos de crianza biológica representan no solamente una de las realidades más importantes del panorama vitivinícola andaluz en términos económicos, sino también la aportación más genuina de nuestra Comunidad Autónoma al mundo de la enología. Tanto por su peculiar método de elaboración y crianza como por sus características organolépticas, los finos y las manzanillas son vinos sin parangón a nivel internacional, además de representar la esencia más pura de una forma de entender la vitivinicultura que hunde sus raíces en tiempos remotos.
Ahora, los Consejos Reguladores representantes de las distintas Denominaciones de Origen donde se elaboran vinos mediante este peculiar sistema, pretenden unir esfuerzos para demostrar de forma científica lo que empíricamente ha sido algo asumido tradicionalmente: que la crianza biológica, además de un carácter especial y diferenciado, confiere al vino unas características beneficiosas para la salud. Naturalmente, siempre que éste se consuma de forma moderada y constante.
El proyecto, que será presentado en breve a la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía, estará coordinado por FIVIN y contará con la participación de diversos grupos de investigación, de tal manera que se desarrolle con el máximo rigor científico. Precisamente por ello, los promotores del proyecto estiman que no podrán disponer de los resultados finales antes de tres años.
