ASUNTO: FALSOS BIO
El área de agricultura ecológica de COAG quiere manifestar, una vez más, su oposición a la venta de falsos productos BIO en nuestro país y denunciar el abandono de la producción ecológica por parte de la Administración central, “que sólo es capaz de ceder ante las presiones de la gran industria agroalimentaria”. La oposición del Gobierno español a la nueva normativa aprobada por la UE para reforzar el etiquetado de productos ecológicos y evitar la utilización del término BIO en alimentos no procedentes de la agricultura ecológica “es prueba evidente de la permisividad de nuestro gobierno en este tema”.

“Es más, ha puntualizado Jesús Sanchís responsable de Agricultura Ecológica de COAG, el Gobierno español, lejos de acatar las exigencias de la UE, pretende proponer la modificación de la legislación comunitaria en su favor”.

Según la legislación europea todos los productos comercializados bajo el nombre de Ecológico, Biológico u Orgánico (y sus respectivos prefijos: eco, bio) son aquellos que han sido producidos bajo los métodos de producción de la agricultura o ganadería ecológicas. Pero, según COAG, existe un número importante de productos comercializados en España con el prefijo BIO que no cumplen con estos requisitos y que hacen uso indiscriminado de esta terminología. “Algunas marcas han aprovechado el término para disfrazar sus productos bajo una apariencia de calidad que nada tiene que ver con los laboriosos métodos de producción que se aplican en las producciones ecológicas, creando la confusión entre los consumidores”. Esta situación de incumplimiento de la legislación europea ha llevado a la Comisión a llevar al Estado español ante el Tribunal Europeo de Justicia por infracción del derecho comunitario.

COAG denuncia la intencionada confusión que se ha generado entre los consumidores por parte de algunas empresas de alimentación que, “gracias a la permisividad de la Administración, pretenden adueñarse del prefijo BIO y de la imagen de producto saludable que aporta”, cuando la legislación comunitaria lo ha reservado en exclusiva para aquellos productos de agricultura ecológica que cumplan con una serie de exigencias medioambientales. Esta situación de engaño y “apropiación indebida de imagen” llevó a los agricultores y ganaderos ecológicos de COAG a interponer en julio de 2001 un Recurso ante el Tribunal Supremo en contra del Real Decreto de 11 de mayo que permite la utilización en España del término BIO en todo tipo de productos, sean o no originarios de cultivo ecológico.