BÓBOLI, marca nacional de moda infantil, cierra el año con una facturación de 29 Millones de euros, un 20% más que el ejercicio anterior, cifra de ritmo de crecimiento que prevé repetir para 2015.
En esta línea, la empresa acaba de trasladar su sede central a Llinars del Vallés (Barcelona) donde, gracias a la adecuación técnica y logística de 10.000m2 de almacén en sus nuevas instalaciones, se dará cabida a casi 4 millones de prendas para responder a los pedidos de sus clientes.
Dichos cambios en BÓBOLI, coinciden con el relevo generacional al frente de la compañía, ya que el fundador de la empresa, Francisco Algás ha pasado el testigo a sus hijas Mónica y Arancha Algás, nuevas consejeras delegadas de la empresa, centradas en el Área Comercial y en el Área de Producto, respectivamente.
En esta nueva etapa de BÓBOLI, caracterizada por el crecimiento y expansión de la firma, cabe destacar su apuesta por la “multicanalidad”, como fórmula para garantizar la presencia integral de la marca en todos los canales comerciales: el espacio multimarca tradicional, las tiendas monomarca, el ecommerce y los grandes almacenes, tanto en España como en diversos países europeos.
