Entrevista con Leonardo Bueno, director Económico y Financiero de Corporación Tecnológica de Andalucía (CTA)
Agenda de la Empresa: ¿Cómo se ve la economía española en 2015?
Leonardo Bueno: Creo que se puede ver el futuro con un optimismo bastante razonable. Los últimos análisis de la economía española apuntan a un crecimiento del 2,3% para 2015 según CaixaBank, que BBVA eleva al 2,7%. Para 2016, las grandes empresas prevén un crecimiento cercano al 3%, con lo que estaríamos hablando de tasas similares a las que alcanzaba la economía española antes de la crisis.
A.E.: ¿Qué factores han podido influir en la mejora de los pronósticos de la economía?
L.B.: Principalmente las reformas de flexibilización del Banco Central Europeo, las reformas fiscal y laboral y la bajada de los precios de la energía (petróleo).
A.E.: ¿Sigue habiendo peligros en el crecimiento económico en España?
L.B.: Todavía existen algunas incertidumbres. Aún tenemos que ser capaces de controlar el excesivo endeudamiento público, rediseñar la red de apoyos financieros a nuestras empresas para que los préstamos (privados) o las ayudas (públicas) lleguen y lo hagan en plazo. Además tenemos otros problemas derivados del tamaño de nuestras empresas, ya que hay una relación directa entre el volumen de las empresas y su productividad, capacidad de innovación y de exportación. Por lo tanto, debemos de incidir en incrementar la dimensión de nuestras empresas a través de incentivos fiscales, el fomento de la financiación alternativa a la bancaria o la reducción de trabas administrativas. Aunque este año hemos tenido una sorpresa agradable en materia de empleo, la elevada tasa de desempleo en España, y sobre todo en Andalucía, hace que la recuperación económica siga sin parecer suficiente.
A.E.: Entrando en la material fiscal, ¿cuáles son las novedades para 2015?
L.B.: A finales de 2014, se han publicado distintas leyes introduciendo modificaciones en la Ley del IRPF, una reforma del Impuesto de Sociedades y modificaciones del IVA. Las modificaciones en el caso del IRPF son bastante amplias, aunque cabe destacar una rebaja en la carga fiscal que, de media (según el Gobierno), será del 12,5% por la rebaja de los tramos de retenciones, con la idea de que los contribuyentes tengan más renta disponible y de esta forma se incremente el consumo. En cuanto al Impuesto de Sociedades, destaca la rebaja de los tipos de gravamen general, que se reducirán desde el 30% al 28% en 2015 y al 25%, en 2016. Con respecto al IVA, se realizan pequeñas modificaciones en el ámbito del impuesto, y la principal novedad es que los tipos de gravamen del IVA y de los impuestos especiales permanecen inalterados, por lo menos no nos lo suben.
A.E.: ¿Qué ha pasado con las deducciones fiscales en el Impuesto de Sociedades?
L.B.: En primer lugar, se acabaron las incertidumbres: se confirma que las deducciones fiscales perviven. La recientemente publicada Ley 27/2014 (de 27 de Noviembre) del Impuesto sobre sociedades, presenta novedades en la fiscalidad de la Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i) cuyo alcance es significativo para el tejido productivo español. En el contexto de los incentivos fiscales a la innovación, destacan dos novedades importantes: en primer lugar, la ampliación de la definición de la I+D para los proyectos TIC, “aplicaciones destinadas a la elaboración de productos, procesos o servicios nuevos o mejorados sustancialmente”, corrigiendo el agravio que existía para este sector en la antigua definición de I+D. En segundo lugar, la inclusión en la definición de Innovación Tecnológica a los proyectos demostrativos del sector de la animación y los videojuegos. Como lectura menos positiva, la base de la deducción se minorará por el total del importe de las subvenciones recibidas para el fomento de dichas actividades e imputables como ingreso en el periodo impositivo, en lugar del ajuste del 65% realizado hasta ahora. Las pymes deberían plantearse seriamente aprovechar estas ventajas fiscales como una vía muy adecuada para financiar su I+D+i. De hecho, las deducciones fiscales son una de las fórmulas más ventajosas de abaratar la inversión en I+D+i y la internacionalización. En lo relativo al otro mecanismo de incentivo, la valoración de los intangibles, más conocido como Patent box (art. 23), hay pocos cambios sustanciales, únicamente la eliminación de la determinación de las rentas en el supuesto de intangibles no activados en balance, como el 80 por ciento de los ingresos procedentes de la cesión de aquellos. Desgraciadamente, las empresas no están sacando el partido que deberían a este instrumento porque hay muchos interrogantes. Un reto a medio plazo para la Administración sería desarrollar un informe motivado vinculante que ofrezca más seguridad. Sabemos que están trabajando en ello.
A.E.: Una de las novedades anunciadas en 2014 era el conocido como crédito fiscal, ¿qué ha pasado con él?
L.B.: Bueno, recordemos que la Ley 14/2013 de Apoyo a los Emprendedores y su Internalización establecía un marco excepcional de aplicación de deducciones para empresas que no pudieran beneficiarse del crédito fiscal a corto plazo, esto es, el llamado “cheque fiscal”. Pues bien, la redacción del Impuesto de Sociedades mantiene dicha opción con algunas modificaciones respecto al texto anterior. Por ejemplo, las empresas cuyos gastos en I+D del periodo impositivo superen el 10% del importe neto de la cifra de negocio, podrán aplicar como límite del abono 5 millones de euros, en lugar de los 3 millones que contemplaba la anterior redacción. Como para conseguir este cheque fiscal es obligatorio el informe motivado, sabemos que gracias a esta herramienta está aumentado exponencialmente la demanda por parte de las empresas del informe motivado.
A.E.: Ahora, cuéntanos un poco de CTA, ¿cómo os planteáis el ejercicio 2015?
L.B.: Como siempre, y como no puede ser de otro modo, con muchísima ilusión y esperando que este sea el año definitivo para la consolidación del crecimiento económico en Andalucía, que debe tener unos cimientos fuertes, basados en la competitividad, productividad y la I+D+i. Además, este año se incorporan dos compañeros en el equipo directivo de CTA: Fabián Varas, como Director Técnico, y David Páez, como director de Desarrollo de Negocio. Queremos darle un fuerte impulso a la financiación de I+D+i y conseguir una Fundación más autosuficiente y sostenible en el tiempo. Estamos completando una cartera de servicios empresariales para ayudar a las empresas comprometidas con la innovación a sacarle el máximo partido a su esfuerzo en I+D+i.
A.E.: ¿Alguna novedad significativa para las ayudas de los proyectos de I+D+i de CTA?
L.B.: Sí. Nuestro Comité Ejecutivo acaba de aprobar el lanzamiento de una convocatoria extraordinaria de 14 millones de euros con condiciones especialmente ventajosas para las empresas con el fin de ayudarles a mantener su apuesta por la I+D en estos momentos de inicio de la recuperación económica. Esta convocatoria, que se publicará en breve, ofrecerá mayores porcentajes de incentivo que las habituales y duplica el porcentaje del incentivo que se concede a fondo perdido (pasa del 25% al 50%). Además, se podrá conceder todo el dinero por adelantado por anualidades sin aval (cuando antes se exigía aval por el 50% si se quería por adelantado).
Inmaculada Sánchez