Fujitsu ha presentado su propuesta de Servicio Software Asset Management (SAM), un modelo de servicio que comprende la gestión y optimización de la adquisición, despliegue, mantenimiento, utilización y retirada del software dentro de una organización. La multinacional apuesta por esta práctica, que aporta a sus clientes retornos de la inversión el primer año de un 400%.

En el 2014, sólo un 5% de las organizaciones contaban con este servicio que crecerá hasta un 20% en el 2017, especialmente al ver que las grandes corporaciones pueden estar experimentando una alta presión, debido a las auditorías de fabricantes de software, la complejidad de los modelos de licenciamiento y la necesidad de controlar el importante gasto en esta partida.

Para Javier Láinez, Head of End User Services de Fujitsu, “una práctica SAM consolidada es, sin lugar a dudas, algo que todas las grandes empresas a nivel mundial deben tener. Entre otros motivos porque reduce los costes totales de los activos y evita las frecuentes auditorías no planificadas, que suelen tener un gran componente de trabajo manual y poca precisión”.

Además, señala que gracias a un servicio SAM, “se pueden gestionar correctamente los cambios tecnológicos al permitir modelos de compra de software que contemplan las necesidades tanto actuales como de un futuro próximo. Al mismo tiempo se pueden minimizar los riesgos legales y de tipo reputacional del uso no autorizado de software. A la vez, se facilita la estandarización, al regular una parte tan importante como la solicitud, compra/reutilización, instalación y retirada de software”.