Gas Natural obtuvo un beneficio neto de 404 millones de euros en el primer trimestre de 2015, el 0,5% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior.
En este escenario, el EBITDA consolidado alcanzó en el primer trimestre los 1.369 millones de euros, el 11,8% más que en el mismo periodo de 2014. Este incremento se debió, principalmente, a la incorporación de Compañía General de Electricidad (CGE) al grupo el pasado mes de noviembre, y en el primer trimestre completo aportó un EBIDTA de 125 millones de euros.
La incorporación de CGE al perímetro de la multinacional permitió a Gas Natural compensar el impacto del RDL 8/2014, que el pasado mes de julio redujo la retribución de las actividades reguladas de gas en España, así como el efecto de la desinversión del negocio de telecomunicaciones. Además, contribuyó a elevar el peso de las actividades internacionales en el EBITDA, que pasó del 39,2% al 49,5%.
A 31 de marzo, la deuda financiera neta alcanzó los 17.331 millones de euros, el 2,3% más que a final de 2014 y la ratio de endeudamiento se situó en el 47,7%, por debajo del 48,5% al cierre del ejercicio 2014.
La compañía cuenta con unas disponibilidades de liquidez de unos 10.322 millones de euros, equivalentes a todas las obligaciones financieras durante más de 24 meses.
La propuesta de distribución de resultados del ejercicio 2014, que el Consejo de Administración elevará a la Junta General de Accionistas del 14 de mayo para su aprobación, supone destinar 909 millones a (0,908 euros/acción), el 1,2% más que el año anterior, en línea con el incremento del beneficio neto del ejercicio 2014.
La compañía “continúa comprometida con una sólida política de dividendo en efectivo y prevé mantener el payout en niveles del 62%, en la línea de los últimos años y compatible con los objetivos de crecimiento y desapalancamiento previstos”.
