El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado, tras ser preguntado por las futuras elecciones en España, en particular las autonómicas al Parlamento de Cataluña, que “lo que más me importa es que todo el mundo vote”.
Además, ha asegurado que el Gobierno va a “defender la soberanía nacional” y que le parece “profundamente injusto” que alguien pueda sentirse extranjero en su propio país. “Mientras yo sea presidente”, ha añadido, “la ley se va a cumplir y, desde luego, España no se va a romper como pretenden algunos”.
Así lo ha asegurado el presidente del Gobierno en su intervención en la conferencia de prensa que ha ofrecido junto a la canciller alemana, Angela Merkel, en el curso de la cumbre hispano alemana celebrada el pasado lunes y este martes.
Asimismo, Mariano Rajoy ha subrayado los cambios producidos en la economía española entre los años 2012 y 2015, en los que se ha pasado “de una amenaza de rescate a un crecimiento del 3,3% por ciento”. El presidente ha anunciado que “el objetivo del Gobierno es que la próxima legislatura el número de trabajadores cotizantes llegue a los veinte millones, lo que requiere la creación de medio millón de empleos cada año”.
El presidente ha destacado la importancia que tiene para los ciudadanos el aumento del número de créditos, que ha crecido un cuarenta por ciento con respecto al mismo mes del año anterior. También ha recordado el último Indicador de Sentimiento Económico de Eurostat -que mide la confianza de los ciudadanos en la economía-, el mejor de los últimos catorce años.
Rajoy ha incidido en la relevancia de la formación y ha indicado que “una de las prioridades del presupuesto de 2016 es recuperar el gasto en I+D+i: somos conscientes de que buena parte de nuestro futuro nos lo jugamos ahí”.
Crisis migratoria
Por otro lado, el presidente del Gobierno ha definido la cuestión migratoria y de asilo como el reto más importante al que se enfrenta la Unión Europea en los próximos años y ante el que “no vamos permanecer impasibles”, ya que “Europa no puede renunciar a lo que es, una tierra de derechos”.
Desde la experiencia de un país como España que recibe numerosos inmigrantes y está triplicando el número de demandantes de asilo, el presidente ha defendido la necesidad de una política “europea de verdad para dar respuesta a esta gran tarea”, en la que la Comisión Europea trabaje con “decisión, determinación y coraje”. Asimismo, ha abogado por la cooperación y colaboración con los países de origen, para que vayan progresando económicamente y contribuyan a la lucha contra las mafias que provocan las “terribles tragedias que hemos visto”.
En relación con esta asunto, Rajoy ha informado de que el Gobierno ha ofrecido acoger a 2.739 personas que solicitan asilo y está abierto a revisar esta cifra siempre que se clarifiquen y diferencien las situaciones de petición de asilo y de inmigración económica y otros países atiendan sus compromisos de puesta en funcionamiento de centros de acogida.
