La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha señalado que la gestión de los bosques será un elemento fundamental para combatir la deforestación y la erradicación del hambre en América Latina y el Caribe.

Esta conclusión formó parte de la 29ª Reunión de la Comisión Forestal para la región (COFLAC), celebrada en Lima, donde además se discutieron los adelantos en formulación de políticas públicas para el manejo sostenible de los bosques.

A pesar de que la tasa de deforestación en la región es la segunda más alta del mundo, el Oficial Forestal de la FAO Jorge Meza señaló que, desde el año 1990, se ha reducido a la mitad.

“En los últimos años hemos visto avances significativos en la reducción de la deforestación debido a los esfuerzos para promover el manejo forestal sostenible y a la implementación de políticas de conservación de los recursos naturales”, indicó Meza.

Los asistentes a la reunión de la COFLAC destacaron la función de los bosques para conseguir la seguridad alimentaria y el combate a la pobreza rural y recalcaron que los beneficios de esos ecosistemas deben favorecer a las poblaciones locales que los habiten.

La FAO recordó que la masa forestal que cubre América Latina es de un 47% y que, a pesar de que la región pierde 2 millones de hectáreas por año, la tasa de deforestación disminuyó de 4,45 millones de hectáreas al año entre 1990 y 2000 a los 2,18 millones de hectáreas anuales entre 2010 y 2015.