La red social de fotografías y vídeos, propiedad de Facebook y con tan solo cinco años de vida, cuenta con más de 400 millones de usuarios activos al mes y con una media de 80 millones de fotos compartidas al día que generan más de 3.500 millones de “Me Gusta”. Su sencillo uso y la posibilidad de expresarse a través de una simple imagen o vídeo en la red ha llevado a millones de usuarios de todo el mundo a crearse una cuenta en Instagram.
Pero, ¿alguna vez te has preguntado qué información estás compartiendo? ¿Sabes que tus contenidos están expuestos a millones de curiosos? ¿Realmente quieres que te observen completos desconocidos? La gran popularidad de esta red social ha llevado a los expertos de Kaspersky Lab a reflexionar sobre la manera en la que utilizamos Instagram y en la cantidad y el tipo de contenido que compartimos.
A la hora de crear una nueva cuenta, la mayoría de los usuarios marcan casillas y aceptan los términos y condiciones sin una lectura previa, dejando a un lado el nivel de configuración de privacidad de todas las fotografías que van a compartir. Kaspersky Lab ofrece cinco consejos para disfrutar de la aplicación y compartir los contenidos de una manera segura:
1. Contraseña: fundamental a la hora de abrirse una cuenta. Asegúrate de que eliges una contraseña fuerte y única, que incluya letras, números y símbolos. Así evitarás que los ciberdelincuentes puedan obtenerla fácilmente. Recuerda que las contraseñas son como la ropa interior: deberías cambiarlas frecuentemente y nunca volver a utilizarlas.
2. Privacidad: este consejo dependerá de lo mucho o poco que te guste exhibirte en la red. Si eres muy receloso de tu intimidad y solo quieres compartir tus contenidos con la gente que conoces continúa leyendo. Selecciona la opción de “Cuenta Privada” dentro de “Opciones”, así evitarás que extraños anden fisgoneando tus imágenes. Esto es muy recomendable para aquellos padres, por ejemplo, que quieren compartir con amigos y familia fotografías de sus hijos. Solo recomendamos la configuración de “Público” si realmente lo necesitas o eres una compañía o institución.
3. Saber lo que compartes: al igual que ocurren en otras redes sociales, existen proveedores y herramientas que se introducen en la API de Instagram para facilitar, por ejemplo, compartir imágenes o participar en concursos. Pero, ¿te has preguntado si estas aplicaciones necesitan realmente toda tu información? Si no sabes la respuesta, lo mejor es que inicies sesión en tu cuenta de Instagram y verifiques con qué apps has iniciado sesión, ya que tu cuenta puede ser más vulnerable.
4. Cuidado con las bots: en el caso de los hombres, es muy posible que hasta con una cuenta privada recibas solicitudes de mujeres muy guapas que busquen novio o que tengan mucho dinero. ¡Son fembots! O lo que es lo mismo, mujeres robot. No existen, por lo que no les escribas mensajes privados ni hagas clic en los enlaces que te envíen.
5. Hackeo de cuentas: este tema es muy popular, con más de 1.300 millones de resultados en Google. Además, hay un hilo en Quora que te enseña a hackear las cuentas. ¡No lo hagas! En caso, de que realmente hayan pirateado tu cuenta, inicia sesión y trata de cambiar la contraseña y ajustes.