La tecnología y su introducción en el mundo laboral han permitido la aparición de nuevas formas de desempeñar el trabajo. Un estudio realizado por la compañía de software estadounidense Intuit predijo que, para el año 2020, el empleo tradicional tal y como lo conocemos hoy en día no será lo más común y el 40% de los trabajadores serán contratados para desarrollar proyectos concretos.
“Esta tendencia se manifiesta en el hecho de es que cada vez son más las compañías que requieren los mejores profesionales para proyectos puntuales, con la más alta cualificación y que aporten el valor y el expertise necesarios, sobre todo en el sector TIC”, asegura el responsable de IT Services de Hays, Enrique Fernández Capdepont.
Este tipo de contratos ofrecen tres principales beneficios:
1. La flexibilidad horaria y variedad
Los trabajadores que decidan desempeñar su trabajo por proyectos pueden elegir a sus clientes, las tareas que desempeñar y pueden cambiar regularmente de trabajo, por lo que tienen más oportunidades de decidir cómo y dónde desarrollar su carrera. No existe un compromiso permanente.
A veces, encontrar el trabajo ideal puede llevar mucho tiempo. Este tipo de contratos permite una mayor movilidad, ofreciendo la oportunidad de tomar la decisión más adecuada después de conocer de primera mano, a través de una compañía como Hays IT Services, los diferentes proyectos existentes y eligiendo cuál es la dirección que se debe tomar para conseguir el éxito profesional.
2. Posibilidad de aumentar los ingresos
Los ingresos se pueden ver aumentados considerablemente ya que la disponibilidad de desarrollar proyectos concretos y definidos en el tiempo es altamente valorada por las empresas usuarias.
La capacidad de encadenar diferentes proyectos con la ayuda de una empresa líder del sector en la prestación de servicios es la otra piedra angular que permite a estos profesionales un incremento considerable de sus ingresos de manera estable en el tiempo frente a los contratos de trabajo tradicionales.
La sucesión de diferentes experiencias en distintos proyectos, con diferentes tecnologías, y en variados sectores de actividad junto a la posibilidad de desarrollar su trabajo en aquellas áreas más punteras, permiten a estos profesionales alcanzar una valoración de su actividad mucho más alta en el mercado.
Por último, cabe destacar también que, en algunos casos, estos profesionales pueden estar involucrados en distintos proyectos al mismo tiempo sin que suponga ninguna traba al correcto desempeño de los mismos, multiplicando las líneas de ingresos.
3. Conciliación vida laboral y personal
Los profesionales que trabajan por proyectos en muchos casos tienen la capacidad de distribuir sus tiempos en cuanto al trabajo a desarrollar y su tiempo libre, no sólo a lo largo del día, sino también en cómputo semanal, mensual o anual. Además, pueden dedicar el tiempo que requieran oportuno a seguir formándose, aumentar así su empleabilidad y lograr acceder a aquellos proyectos más interesantes económica y profesionalmente en un futuro.
No todas las personas son capaces
Según el director de IT Services Contracting de Hays “para algunos trabajadores cambiar de manera habitual de trabajo es una situación estresante. Conocer gente nueva, aprender nuevos procesos y acostumbrarse a un nuevo entorno cada vez que se inicia un nuevo contrato puede ser un reto para algunos”.
También hay una mayor presión sobre estos trabajadores ya que se espera de ellos que aporten valor desde el primer día. “La percepción de falta de estabilidad financiera también puede resultar difícil. Muchos de estos trabajadores, no se benefician de vacaciones pagadas u otros incentivos que se conceden a los trabajadores de plantilla, aunque a veces sus ingresos suelen ser más altos que los de un trabajador permanente en una empresa” puntualiza.
Además, a este tipo de trabajadores no se les exige la misma polivalencia que a los de la plantilla, ya que se les suele contratar para desempeñar labores concretas, ni existe la misma presión, excepto por los plazos de entrega y realización de la tarea para la que se le ha contratado.
