Yogur Café, la enseña de restauración, emprende su plan de crecimiento nacional, introduciendo en el mercado un modelo novedoso en el que se combinan los conceptos de yogurtería y cafetería.
Para este proyecto, la enseña ha confiado en el sistema de franquicias, puesto que es el que mejor se adapta a su objetivo de crecer de manera rápida y consolidada para llevar el modelo de negocio a todo el territorio nacional y cumplir su objetivo de abrir 30 establecimientos a medio plazo.
Yogur Café comienza esta andadura con el respaldo de un punto de venta en Toledo, que con más de tres años en funcionamiento ha conseguido obtener una alta rentabilidad y ha superado sus objetivos establecidos en el último ejercicio.
El éxito de la firma reside en la gran variedad de su oferta y el refinado servicio al cliente. Todos los productos están elaborados con materia prima de calidad, a base de ingredientes frescos, sanos y naturales. Su especialidad es el yogurt helado que se puede combinar con toppings y siropes y degustar en sus tres variedades: clásico, yogur completo, o yogur-bol.
Asimismo, otro de los elementos destacables en la carta de Yogur Café es su selección de cafés. A las 10 variedades incluidas en la carta, la marca suma una carta especial de cafés Nespresso con otras ocho especialidades. Un total de 18 opciones para disfrutar del mejor café en cada momento del día.
Para completar su propuesta, la compañía ofrece batidos, zumos o smoothies preparados con la mejor fruta fresca. Además cuenta con un surtido de deliciosos gofres, tortitas o crepes elaborados al momento.
La inversión necesaria para poner en funcionamiento una franquicia Yogur Café ronda los 37.000 euros, precio que incluye el canon de entrada y existencias iniciales, para locales desde 45 metros cuadrados, en poblaciones de más de 50.000 habitantes.
