El consejero de Hacienda del Gobierno de Aragón, Fernando Gimeno, ha anunciado que el Gobierno central transferirá de forma inminente a Aragón 181 millones del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), correspondientes al primer trimestre, lo que permitirán hacer frente a vencimientos y amortizaciones de deuda y cubrir déficit de la Comunidad. Además, ha informado de que se han pagado ya 40 millones de la PAC que llegarán a “familias aragonesas de las zonas rurales”.

El consejero ha comparecido para explicar el informe de la Intervención General de la Comunidad sobre el presupuesto de 2016 y que se ha elaborado en función de la liquidación provisional de 2015. En este sentido, ha anunciado medidas de control para evitar que aumente el gasto previsto en las cuentas de este ejercicio.

imagenes_Gimeno_877bc96bEl documento, que se publicará en la web del Gobierno de Aragón, concluye que el presupuesto de ingresos es “realista”. “Las previsiones de ingresos están realizadas conforme a estimaciones razonables”, señala el informe. El consejero de Hacienda ha subrayado que es “la primera vez que ocurre esto en esta Comunidad” y ha recordado que precisamente un informe anterior de la misma Intervención sobre el presupuesto de 2015 detectó 620 millones de insuficiencias presupuestarias.

La interventora también destaca que en el Salud “se ha reducido la brecha entre el gasto real del organismo y el gasto presupuestado, aunque continúa existiendo una diferencia por un importe de 100 millones de euros”, y que hay insuficiencias presupuestarias en Educación y Sanidad.

Por su parte, Gimeno ha aclarado que algunas de las cuestiones señaladas por la Intervención General ya se han resuelto y ha hecho referencia a la consignación para pagar la extra a los funcionarios, que se abonará en marzo con parte de los 56 millones de euros retenidos recientemente. En este sentido, ha advertido de que algunos de los asuntos detectados -como la extra- tienen que ver con el resultado de la tramitación parlamentaria del presupuesto de 2016.

“Más que de insuficiencias hablamos de redistribución de créditos para ajustar el presupuesto en su justo término una vez que ha pasado por las Cortes”, ha insistido Gimeno, que ha avanzado que al final de este ejercicio como máximo quedarán por imputar al presupuesto 100 millones de euros frente a los cerca de 500 que había a principios de 2015 y los 250 de finales del año pasado.

“Del informe se han resuelto ya cifras muy importantes y el resto se resolverán a lo largo del ejercicio”, ha argumentado. Para conseguirlo, el consejero Gimeno ha aludido a un posible incremento de la recaudación sobre las previsiones iniciales, a la transferencia de ingresos del Estado que no estaban previstos en el presupuesto (por ejemplo, para Educación) y a la adopción de medidas del control del gasto para evitar que haya desviaciones sobre lo presupuestado, pero “manteniendo los compromisos y las prioridades sociales”.

Gimeno ha asegurado que la situación del presupuesto es “mucho mejor” que el año pasado y ha señalado este informe de Intervención como “un instrumento fundamental de orientación para saber por dónde tenemos que trabajar”. “La diferencia con años anteriores es que tomamos medidas desde el principio”, ha argumentado. También ha mantenido el compromiso del Gobierno de Aragón con el cumplimiento del déficit para este año.