El Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, nombró el pasado miércoles una Comisión de Alto Nivel sobre Trabajadores de Salud y Crecimiento Económico, que tendrá la tarea de explorar soluciones para la insuficiencia de empleados en el sector sanitario de cara al futuro.

Los trabajos de la Comisión empezarán este mes con la intención de presentar sus conclusiones y recomendaciones al titular de la ONU en septiembre próximo.

Según las proyecciones de Naciones Unidas, para 2030, la demanda de servicios de salud crearía más de 40 millones de nuevos empleos en el sector, sobre todo en los países de renta media y alta.

Por su parte, las naciones pobres deberán superar un déficit potencial de 18 millones de trabajadores de salud para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Dicho déficit será exacerbado por la creciente tendencia a emigrar de sus países de origen del personal de sanidad y esto, a su vez, amenazará tanto la estabilidad de los sistemas de salud como la seguridad sanitaria global.