Los planes de movilidad para impulsar la internacionalización de los trabajadores han aumentado un 25% según el estudio Global Mobility Trends Survey 2015, que analiza el estado de la economía mundial y en el que han participado un total de 143 empresas.
Una de las novedades en el informe es la descripción del perfil de los expatriados, que ha sido examinado por primera vez. Así, se concluye que el 81% son hombres y un 59% tiene entre 35 y 54 años. Los trabajadores que se han acogido a un programa de movilidad internacional quieren ascender en su carrera profesional.
Otros aspectos como son la calidad de vida en el lugar de destino o los beneficios que van a obtener durante su estancia también son valorados positivamente. Además, el estudio revela que el 84% de los encuestados que ya han cambiado su lugar de trabajo, estarían dispuestos a desplazarse de nuevo si su empresa actual les propusiera esta posibilidad.
En el tejido empresarial español también se valora el escenario del mercado actual. Por eso, las compañías revisan sus planes de movilidad y pretenden activarlos durante este año para no perder la oportunidad de mejorar su proyección internacional. Lo que hace unos años surgió como una estrategia para paliar los efectos de la crisis, se ha convertido en una filosofía, en un nuevo paradigma e incluso en una forma de aprendizaje. En definitiva: un reto.
Ahora, uno de los desafíos más importantes para el área de Recursos Humanos es conseguir que el crecimiento conserve los intereses de la empresa en las diferentes filiales. Asimismo, consolidar la cultura del grupo es vital si se quiere aprovechar un equipo humano cada vez más plural. Además, para que la experiencia no resulte negativa, se debe realizar un seguimiento del periodo de adaptación del trabajador. En este sentido, la protección del expatriado es otro de los aspectos que no conviene desatender. Se trata de una de las responsabilidades legales de la compañía en las que se incluyen servicios como la póliza de salud o la asistencia en viajes.
Conseguir nuevos clientes y aumentar el volumen de negocio son algunos de los principales objetivos para las empresas que se adaptan a los nuevos tiempos. Durante este recorrido, la financiación y la legalidad en el país de destino han sido y seguirán siendo los principales obstáculos. Mientras tanto, la innovación se consolida como uno de los valores más importantes para responder a las exigencias del mercado. Eventos como IMEX, la feria de negocio internacional que se celebrará en Madrid los días 6 y 7 de abril, impulsarán la internacionalización de las empresas españolas.
