La Comisión Europea ha impuesto una multa de 5.194.000 euros a la empresa española de hortalizas frescas y en conserva Riberebro por su participación en un cartel para coordinar precios y repartirse a los clientes de setas y champiñones en conserva en Europa durante más de un año.

La comisaria Margrethe Vestager, responsable de la Política de Competencia, ha declarado que “tener acceso a alimentos a precios competitivos es esencial para los consumidores europeos. El cartel de setas y champiñones en conserva afectó a las ventas a minoristas en toda Europa. La decisión de hoy vuelve a poner de manifiesto la determinación de la Comisión en sancionar los carteles e imponer multas a todos los participantes en el cartel”.

El cartel afectaba a las setas y champiñones en conserva vendidos en latas y tarros (es decir, no frescos ni congelados) para ventas de marcas privadas en el Espacio Económico Europeo (EEE). Estas ventas se llevaban a cabo a través de procedimientos de subasta a minoristas y mayoristas del sector alimentario, por ejemplo las empresas de autoservicio y clientes profesionales como las empresas de servicios de restauración.

El objetivo global de los miembros del cartel era estabilizar sus cuotas de mercado y detener un descenso de los precios. Para alcanzar esto, los miembros del cartel intercambiaron información confidencial sobre ofertas, fijaron precios mínimos, se pusieron de acuerdo sobre objetivos de volumen y se asignaron clientes entre ellos.

El cartel era un pacto de no agresión con un sistema de compensación en caso de transferencia de clientes y aplicación de precios mínimos que se habían acordado previamente. La Comisión constató que Riberebro participó en el cartel del 10 de septiembre de 2010 al 28 de febrero de 2012.