La sitauación en el país es tan insostenible que las autoridades nacionales han decidido suspender la cotización de su moneda y se ha autorizado a realizar operaciones de compraventa con divisas extranjeras. La alta tasa de inflación ha provocado que el dólar de Zimbabwe carezca de valor.

 

A esto hay que sumar la escasez de empleo en el país, ya que de un total de doce millones de habitantes, tan sólo 480.000 está en activo, lo que supone tan sólo el 4% del total de la población de Zimbabwe.