A partir de los datos publicamos por la Seguridad Social, UPTA ha indicado que “podemos solucionar parte del problema de las pensiones si somos capaces de establecer un salto en las cotizaciones de los trabajadores autónomos”.

La organización ha informado de que dichos datos “comienzan a darnos la razón en cuanto a la falta de progresividad del sistema de cotización al RETA”. En la actualidad, “tenemos un déficit de cotización que ha hecho que nuestro sistema de protección se encuentre en estos momentos en una situación altamente delicada”.

UPTA Andalucía ha subrayado que según el análisis sobre la evolución de las pensiones en estos últimos meses, los datos son concluyentes. “En nuestra comunidad en el pasado mes de junio el sistema estuvo pagando prestaciones a más de 232.617 beneficiarios del RETA con una media de 618,14 €. Más de 141.338 son pensiones de jubilación con una media de percepción económica inferior a 688 €; seguidas de las pensiones de viudedad, más de 59.033, con una media de 491,07 €. El número de pensiones por incapacidad permanente ascendió a 21.560, con una media económica de 668,44 €; y por último las pensiones de orfandad que fueron 9.716 beneficiarios, con una media de 283,53 €. Por tanto en Andalucía, el coste de las pensiones del sistema supone más de 143 millones de euros”.

Además, UPTA ha indicado que en Andalucía “somos más de 508.000 autónomos y autónomas de los cuales un 80 % están cotizando en bases mínimas, es decir, la recaudación total no supera los 141 millones de euros. Por lo tanto, esto deriva en un déficit de 2 millones euros con carácter mensual, con lo cual nos puede provocar grandes problemas en el futuro. Sin embargo, estimamos que al menos el 30% de los autónomos obtienen ingresos que cuadriplican la base por la que cotizan, que suele ser la mínima y por lo tanto podrían aumentar su contribución al sistema y mejorar sus niveles de protección social”.

Por ello, UPTA Andalucía ha lanzado algunas propuestas como que se cotice en función de los ingresos reales, estableciendo para ello un cálculo progresivo en el que los autónomos que más ingresos obtengan, aumenten su cotización. Además de establecer “una cotización especial a los que sus ingresos anuales están por debajo del salario mínimo interprofesional, haciendo de esta manera la solidaridad contributiva al sistema”.