El retraso medio en los pagos en el segundo trimestre de 2016 de las empresas hosteleras se eleva a 20,14 días, lo que lo sitúa 6,67 días por encima de la media nacional, 13,47. Aunque la cifra disminuye entre 2010 y 2016 en 8,30 días, siguiendo la misma tendencia de descenso que el resto de sectores de actividad, es uno de los tres que peor se comporta en este periodo, junto a Construcción y Administración.

Así se desprende del estudio sobre Comportamiento de Pagos de las Empresas del Sector de Hostelería entre 2010 y 2016 elaborado por INFORMA D&B (compañía de CESCE).

La proporción de empresas que pagan puntualmente durante el segundo trimestre llega al 44%, por debajo del 48% de media nacional. Sin embargo el comportamiento de las dos ramas del sector es diferente: en el caso de los Servicios de alojamiento se reduce hasta el 34% pero en el caso de los Servicios de comidas y bebidas alcanza el 51%, superando la media nacional. Las tasas de pago a más de 120 días alcanzan el 7% en comidas y bebidas, frente al 3% de alojamientos, porcentaje similar al del conjunto del país.

Las empresas de Hostelería con menor retraso medio para hacer efectivas sus facturas se localizan en el País Vasco, 12,99 días, Navarra, 15,14 días y Madrid, 15,92 días. Al contrario, las demoras más elevadas se dan en Castilla La Mancha, 43,51 días, La Rioja, 35,75 días, y Murcia, 26,76 días. En todas las comunidades el sector se comporta peor que la media nacional salvo en Canarias, donde la demora es de 17 días frente a los 19 del conjunto.

Las grandes compañías hosteleras son las que tienen una menor demora, 13,14 días, batiendo la media nacional que es de 15,97 días para compañías de este tamaño. Las pequeñas dilatan los pagos 14,17 días, y las medianas 15 días. Son las micro empresas, con 26,69 días, las que peor se comportan, muy por encima de la media de su tamaño, que es de 14,30 días.