“Aunque las perspectivas de crecimiento se verán afectadas por vientos contrarios provenientes del exterior, calculamos que la proyección económica de la región se mantendrá en el 4,5% en 2016, apuntalada por un fuerte consumo público y privado, un fuerte gasto en infraestructuras y políticas fiscales, antes de subir al 4,8% en 2017″.

Así se desprende de un comunicado de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de los diez países miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) que ha tenido lugar en la capital de Laos, Vientián.

Los países del sudeste asiático han indicado que el producto interior bruto (PIB) de los diez miembros fue de 2,43 billones de dólares en 2015 y el comercio del bloque regional alcanzó los 2,28 billones de dólares en 2015, de los cuales el 24% correspondió el intercambio interno.

Por su parte, la inversión directa totalizó 120.000 millones de dólares el año pasado, cantidad que en un 62,5% se invirtió en el sector de servicios.

Además, los gobernantes de la ASEAN se han reafirmado en su “compromiso de seguir mejorando el ambiente financiero, particularmente en términos de fomentar la inversión, aumentar la transparencia y ampliar la liberalización en la región“.

Filipinas organizará las reuniones del grupo durante 2017, cuando el bloque cumple su 50 aniversario.

La ASEAN está formada por Myanmar (la antigua Birmania), Camboya, Filipinas, Indonesia, Laos, Malasia, Singapur, Tailandia, Vietnam y Taiwán, países con una población combinada de más de 620 millones.